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URA jugó como lo requiere un partido de esta índole y sumó un triunfo importantísimo. MOISÉS MARTÍNEZ
URA juega en Madrid como en casa
Rugby

URA juega en Madrid como en casa

Magnífico triunfo en Pozuelo ante Olímpico, con el que se hacen fuertes fuera del Juan Rojas, al lograr un segundo triunfo seguido y con el que ven recompensada su propuesta

R. I.

ALMERÍA

Lunes, 10 de diciembre 2018, 00:17

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Hace dos semanas se viajó a Madrid y se asaltó el Paraninfo, venciendo a un gran Cisneros Z para dejar el farolillo rojo. Se volvió a caer al fondo siete días después, al perder frente a Trocadero Marbella en la despedida del año 2018 en casa en un choque que jamás debió perderse y en el que se hicieron más ensayos que el rival. Pero otra vez lo han vuelto a hacer los cruzados, viajando a Madrid para ganar por segunda ocasión consecutiva, esta vez a un potente Olímpico en su feudo del Valle de Las Cañas y cerrar la primera vuelta fuera de la última plaza. No solo se ha logrado eso, sino que echando la vista atrás se ha superado el récord de puntos hasta el momento a esta altura de Liga, que era de 15, situándose en la cuarta aventura en División de Honor B en 16.

Sin duda, por méritos y propuesta pudieron ser más, pero en eso no quiere pensar Nacho Pastor, sino más bien en el futuro cercano. «No sirve quejarse de los puntos dejados por el camino; estamos dispuestos a seguir trabajando duro para esta segunda parte de la Liga». Pese a que había rotaciones de posiciones para varios hombres debido a las bajas, si bien regresó Lucas Melián para por fin debutar esta temporada y ser decisivo firmando el ensayo de la victoria, el técnico de Unión Rugby Almería definió el inicio del encuentro como «los mejores minutos del campeonato junto con el final de la primera parte frente al Liceo, pero esta vez con juego colectivo muy vistoso». En ese sentido, para el primer cuarto de partido URA dominaba por 0-14 con dos grandes ensayos.

Muy agresivos

Los cruzados salieron muy agresivos, enchufados si se prefiere, siendo mucho mejores que su rival, pese a que Olímpico tiene más que merecida esa posición consolidada en la mitad de la clasificación. El triunfo, de hecho, fue ajustado y muy trabajado, con clara diferenciación entre la primera y la segunda mitad. El mejor guión madrileño se desarrolló tras el descanso, con un oficio que supo en varios momentos 'sacar' a los unionistas del encuentro. Hasta ese momento se había depositado el oval en zona de marca por partida doble, con trabajo de delantera y culminación de Padilla, en el minuto 16, ganando una superioridad, y con despliegue de los tres cuartos para try de Nemo en el 23, ambos con el acierto a palos de Graciarena para transformarlos.

El adversario de enfrente tiró de sus propios argumentos para dejar el 0-14 en el marcador muy menguado, primero con una patada de castigo de Gonzalo Rivilla, un viejo conocido, y después con un ensayo que le costó fases y fases, minutos y minutos, cerca de la zona de marca almeriense para al final sí dar con el hueco. Así, tras una propuesta magnífica de URA, encontrando los puntos débiles de un muy ordenado Olímpico para penetrar en su defensa, al descanso se llegó con todas las opciones abiertas. Es cierto que la sensación de los hombres de Pastor era la de que por fin la propuesta daba el dominio territorial y se reflejaba en el tanteo del 0-14, pese a que después se ajustase al extremo e incluso se perdiera con la vuelta al tanteo de los madrileños.

Así, al poco del reinicio, de nuevo Gonzalo Rivilla estuvo acertado a palos y con ello tensó la cuerda hasta el 13-14, con el agravante de que Manu Hernández fue expulsado definitivamente en el minuto 64. Con mucho por delante y se tuvo que templar el ánimo ante la estrategia de ralentizar el juego que en las filas locales se estuvo poniendo en práctica. Tras recuperar una melé en contra de manera brillante y alejar el balón hasta 22 contraria, una gran jugada del zaguero de Olímpico provocó una ruptura por el centro y después la apertura a la derecha para que los de Pozuelo ensayasen y subiesen el 18-14, sin fortuna para Rivilla en esa ocasión al estar muy escorada la transformación. Era el minuto 67 y había que tener la mente fría de nuevo y creer en el juego.

Se logró con dos arreones consecutivos, determinando Alberto Ruiz que no había ensayo en una gran jugada de delantera tras touche, pero sí en la consiguiente melé a favor que empujó hasta la zona de marca con el balón en el pie de Lucas Melián para que el '8' argentino firmase la jugada del triunfo. No se transformó y se estuvo a merced de algún golpe de castigo elegido a palos para no perder (18-19). No podía suceder por segunda semana consecutiva tal desgracia y esta vez sí se jugaron bien las bazas para alcanzar el pitido final con el segundo triunfo en tres primeras finales de la lista de cinco, con punto en la segunda pese a la derrota. Queda demostrado el buen rendimiento cruzado en esta fase decisiva de la competición, tal y como predijo Nacho Pastor.

El resultado, lo mejor

El técnico cruzado valoró el resultado como «lo mejor» ante un partido de gran oficio por parte de Olímpico, frente a lo que hubo «muchas ganas de los chicos» en El Valle de Las Cañas, superando las obligadas rotaciones antes citadas. La Liga no para todavía, puesto que, antes de llegar a Navidad, Unión Rugby Almería visitará a Jaén, «un adversario que ya ha demostrado que tiene todas las aspiraciones de permanecer en la categoría», y a Industriales. Aspiración, «consolidar la mejora de juego y dejar sobre el campo el trabajo en los entrenamientos».

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