Escrich pide «valentía» a sus jugadores antes de afrontar una gran final en Zaragoza

Pasado el susto propiciado por la inesperada resistencia del colista, José Escrich admitió que «fue un partido de mucho sufrimiento, ellos compitieron muy bien, venían en buena línea, lo dije en la previa, que estaban encajando pocos goles, y eso se reflejó en la pista. Si la Liga empezase en la segunda vuelta seguro que no irían en esa posición». Tampoco eludió la autocrítica el entrenador del Inagroup El Ejido, apuntando que «nos encontramos un rival que nos exigió más de lo esperado, pero también es verdad que nos pesó la responsabilidad, el saber que estamos sin red y que cualquier tropiezo nos condena a quedarnos sin opciones».

El hecho de que cada vez quede menos para intentar conseguir el objetivo marcado a principio de temporada sobrevuela por el vestuario y Escrich no dudó en reconocer que «fuimos más conservadores de lo que hubiésemos querido, con miedo a cometer el error, a encajar algún gol que no debamos, eso te lleva a jugar más lento, con menos ritmo del habitual y eso es algo que hubo que hablar en el descanso».

El mensaje fue claro a los futbolistas, ya que «tenemos que ser valientes y consecuentes con nuestras ideas y con el trabajo de la semana, entiendo que es difícil porque la cabeza, a veces, te limita, pero el partido se convirtió en una pesadilla, nos costó mucho encontrar situaciones de gol y parar el juego directo que hacían ellos».

Sobre la épica final, que dejó los tres puntos en casa, indicó que «no nos quedaba otra que insistir en el juego, hicimos situaciones que teníamos muy trabajadas y encontramos un gol importante porque no es nada fácil en fútbol sala un 1-0». Hubo que sufrir, no obstante, porque «ellos jugaron de cinco y nosotros nos precipitamos un poco, tuvieron un par muy claras».

David Señoret fue el héroe de la jornada con su solitario gol, aunque también quiso, como el técnico, recordar que «habíamos planteado durante la semana el partido muy bien, pero todos los equipos te compiten en Segunda División, tuve la suerte de meter el gol y llevarnos la victoria».

El ex del Bisontes de Castellón, que vivió un partido muy especial, reconoció que «hay veces que el balón no quiere entrar, tuvimos ocasiones», destacando que «todo se aprieta más al final de Liga, todos los equipos necesitan puntos para sus objetivos».