El CD El Ejido merece más que un empate ante el Real Murcia

A los celestes le espera ahora la muy complicada segunda fase, en la que estará en juego la permanencia, ocupando el cuarto puesto entre los ocho equipos que lucharán por evitar el descenso. Serán el Recreativo Granada, con 23 puntos; Las Palmas Atlético, con 21 puntos; Recre, con 20; CD El Ejido, con 19; Marbella FC, con 18; Yeclano, con once; CD Marino, con diez, y el Lorca Deportiva, con nueve.

Los primeros 45 minutos acabaron con empate a todo, desde goles a dominio, e incluso hasta de peticiones de penalti por jugadas en las dos áreas. El envite comenzó con presión ofensiva del Real Murcia, dada la importancia vital que tenían los tres puntos. Una presión inicial que se topó con el buen posicionamiento del CD El Ejido, que salió muy bien plantado y alejaba, sin ningún tipo de problemas, cualquier asomo a su área, a la par que los de Fran Alcoy estaban atentos a la posibilidad de contragolpear buscando cobrar ventaja en el marcador.

Esa búsqueda la encontraron en el minuto 15, cuando en uno de esos intentos el balón le llegó a Jon Etxaniz, que se percató de la internada de Jonxa quien, después de controlar el servicio de su compañero, conectó un potente disparo, con la izquierda sobre la marcha y desde casi el vértice del área, que hizo inútil la estirada de Champagne. Era el 0-1 que caía como un 'jarro de agua fría' en el ánimo de los casi 5.000 seguidores granas que había animando a su equipo. Tras el gol, el control del encuentro se decantó para los de Fran Alcoy, ya que además de con la ventaja en el marcador tenían a su favor las prisas de los de Loreto. Con esas referencias llegó un nuevo acercamiento celeste con peligro al área local, pero Miguel Olavide no llegó por poco a un remate que casi 'olía' a gol.

Como era lógico y con el paso de los minutos, tras el 'mazazo' del gol, el Real Murcia comenzaba a serenar su juego, buscando igualar el marcador, elaborando sus primeras llegadas a los aledaños del meta Wilfred, que en el m. 19 tuvo que salir fuera del área para cortar un bien elaborado contragolpe local. En el m. 24 y en una jugada de similares características, llegó el tanto del empate para el equipo grana, con un balón de Toril sobre Adrián Fuentes y este, sobre la marcha y con la izquierda, conectó un duro lanzamiento que no pudo atrapar el guardameta Wilfred.

A partir del gol, aumentó la presión ofensiva del Real Murcia y con ello el control del partido, aunque el CD El Ejido siguió manteniendo un buen criterio en su juego de contención. El 1-1 dejaba muchas interrogantes en el aire y estaba claro que los dos equipos estaban en la lucha por marcar el segundo para encauzar la posibilidad de victoria. Debido a esa 'doble necesidad', las jugadas en el área, pidiendo penalti, se repitieron por ambas partes, pero sin que el árbitro hubiese visto infracción. En el m. 43, el Real Murcia tuvo una buena ocasión para adelantarse, pero el intento de Toril, desde dentro del área, salió fuera por muy poco. Con los mencionados 'empates', la llegada del descanso.

En la segunda parte, apenas iniciada la misma, el partido entró en otra dinámica, ya que cuando transcurría el m. 49, el Real Murcia logró adelantarse. Tras una llegada al área ejidense, el balón salió despejado hacia la línea de córner y el lanzamiento originó una jugada confusa y embarullada, el balón salió suelto y Mario Abenza, desde el suelo y de rebote, logró enviar al fondo de la portería del CD El Ejido. El 2-1 llevó a Fran Alcoy a realizar tres cambios, los tres de una 'tacada' en el m. 57, buscando mayor mordiente ofensiva.

El triple cambio reactivó al equipo, ya que tanto Boris como muy especialmente Bryan, que junto a Sergio Pérez habían entrado, protagonizaron sendos remates con peligro, sobre todo el de Bryan que hizo pasar apuros a la zaga local. Pese a ello, el Real Murcia no dejaba a un lado la búsqueda del tercer tanto, lo que pudo lograr en el m. 72, cuando Toril se plantó 'cara a cara' ante Wilfred, pero su intento fue neutralizado con una gran intervención del meta del CD El Ejido. El Real Murcia apretaba y buscaba el 3-1 de la tranquilidad.

Sin embargo, lo que se encontró fue el 'palo' del 2-2, cuando transcurría el m. 80. De nuevo Bryan, que fue el gran revulsivo celeste, acaparó el gran protagonismo del gol de empate, tras realizar una vistosa jugada personal dentro del área, envió el balón casi a la línea de gol y allí, tras no acertar a despejar la defensa y no ser rematado por Boris, sí lo hizo Etxaniz mandando al fondo de la portería. Era el 2-2 y de nuevo, pero esta vez más grande, el 'jarro de agua fría' para el entorno grana. Desde el gol hasta el pitido final, lo esperado. El Real Murcia, ya a la desesperada, buscando el 3-2 y el CD El Ejido, aunque nunca dejó de intentar ganar el partido, dando por 'bueno' el empate. Después, el adiós celeste a la primera fase, defraudante en líneas generales. Ahora, en la segunda, le toca 'despertar' o ya saben lo que espera.