El CD El Ejido se divierte con una goleada salvadora ante el Marino

La segunda parte fue un trámite de poco más de 45 minutos en los que el conjunto ejidense no se propuso hacer más daño ante un Marino que, pese a todo, peleó por encontrar un premio inútil, pero merecido, con Nami como su jugador más destacado en ese periodo, tras el trabajo incansable del exejidense Rodrigo Rivas que obligó a trabajar de lo lindo a un Godino que entró al campo parar sustituir a Wilfred, lesionado a los 25 segundos. Ahora toca pensar en el Marbella, en el primer partido de la segunda vuelta, que se jugará el próximo domingo en Santo Domingo.

Mal comienzo para el CD El Ejido, que a los 25 segundos perdió al cancerbero Wilfred por lesión, al intentar despejar un balón en largo que le cayó al exejidense Rodrigo Rivas -se marchó en el mercado de invierno- y la salida del meta ejidense acabó con este golpeado por el delantero del Marino, lo que hizo que Jesús Godino, que sólo había jugado el partido de Copa en Riazor, tuviera que ocupar su puesto bajo palos.

Lo cierto es que, con esporádicas apariciones en ataque del cuadro insular que no llegaron a inquietar al equipo celeste, este movió siempre en las proximidades del área y el primer disparo claro, tras un aviso anterior de Extaniz anulado por fuera de juego, el vasco aprovechó un gran servicio de Toni Dovale para entrar en el área por el costado diestro y lanzar un disparo seco abajo y cruzado que sorprendió a Ángel Galván para poner al CD El Ejido con ventaja en el marcador.

Y sin 'mediar palabra', llegó el segundo a la salida de un córner, botado por Toni Dovale que tocó de cabeza Etxaniz, despejó Ángel Galván, pero sin potencia para sacar el peligro, y Checa, que había subido al ataque, remachó para poner más ventaja en el marcador para los de Fran Alcoy, enchufados en busca de la tercera victoria consecutiva, tras las logradas frente a Recre y Las Palmas Atlético.

Los ejidenses controlaron el partido con posesiones largas que 'alejaron' las opciones de crear peligro al conjunto dirigido por Kiko de Diego, que si lo intentó fue consecuencia de acciones a balón parado que no inquietaron a Jesús Godino. Es más, el cuadro del Poniente almeriense aprovechó los errores del Marino para ampliar las distancias. En el 19, un balón mal cedido atrás por Niki le cayó a Juanje que atrajo a uno de los centrales dejando libre a Etxaniz para que este pusiera el tercero, tras el buen servicio del extremo celeste.

El Marino, cerca de confirmar su descenso antes de empezar el partido, ya lo tenía 'cerrado', pero no dejó de intentarlo. En el 25, Rodrigo Rivas estuvo cerca de sorprender a Godino, pero el meta ejidense, adelantado, reaccionó a tiempo para despejar el disparo del colombiano a saque de esquina.

Una raya en el cielo porque el cuadro ejidense se manejó con soltura, moviendo el balón en las cercanías del área para buscar espacios en la basculación. En el 29, gran jugada de Jon Etxaniz, que robó el balón y se lo puso para Adri Cova, que entró por banda derecha, y se la devolvió al goleador celeste que, de cabeza, puso el tercero de su cuenta, el cuarto del conjunto de Santo Domingo ante un Marino que tuvo en Rodrigo Rivas a su jugador más activo. En el 36, Godino otra vez evitó el tanto del exjugador del CD El Ejido.

El inicio de la segunda parte fue más pausado por parte celeste, como si no se quisiera hacer más daño. Fran Alcoy dio descanso al trigoleador, a Jonxa y a N'Diaye para utilizar a Zubiri, Miguel Olavide y Boris. La novedosa presencia de Nami en el Marino le dio opción de marcar en el 51, en una contra que el recién incorporado mandó por encima del larguero. En el área contraria, la parsimonia de Boris Garros para decidirse en el disparo, mano a mano con Ángel Galán, impidió que llegara la 'manita' a Santo Domingo.

Con la pausa, se creció el cuadro tinerfeño que, en el 66, pudo acortar distancias con un balón para Nami que entró por la derecha y su disparo lo despejó Jesús Godino. El recambio del Marino, en el 70, tuvo una nueva ocasión que certificó el merecimiento del equipo insular por ver portería. Algo que tampoco lograron ni Boris ni Ferraz, por parte local, ni Moussa, en el 91, por parte visitante, en la última acción de un partido de confirmaciones. La más dramática, la del descenso del Marino. La mejor, la que habla de un CD El Ejido cerca de la salvación.