El CDEl Ejido sigue sin 'despegar' en Santo Domingo

El revés o, casi más que ello, la imagen colectiva ofrecida por el CD El Ejido debe servir de muy obligada reflexión. Sobre todo para sus partidos en casa, donde está viendo cómo 'vuelan' los puntos, con un criterio de juego distinto al que ofrece cuando le toca actuar como visitante. No es bueno que cuando vayan transcurridas seis jornadas del campeonato, se mire con recelo hacia la parte baja de la tabla clasificatoria.

Salvo en los primeros minutos, en los que el CD El Ejido disparó a puerta en dos ocasiones, una a cargo de Jorge García, despejada de puños por Valens, y otra de Jonxa, que le salió ligeramente desviada, el resto del primer tiempo fue de un creciente mejor posicionamiento del equipo nuciero. En el minuto 14, llegó el primer gol de la tarde a favor de los visitantes, fruto de una buena jugada de 'pizarra', después de una falta lanzada por José Romera, en la que no anduvo atenta la zaga celeste y Álex Salto, de disparo cruzado, logró batir a Godino. Tras el gol, tímido intento de reacción del CD El Ejido, pero sin llegar a generar peligro en el área rival.

En el minuto 21, pudo llegar el 0-2, pero Jesús Godino anduvo muy atento al remate de Javi Martín, deteniendo su peligroso disparo. Después, y hasta la llegada del descanso, más de lo mismo. Una especie de querer y no poder de los celestes, mostrando su incomodidad ante el planteamiento de los de César Ferrando, que vieron, sin ninguna dificultad, cómo se llegaba al descanso.

Con la ilusión en las gradas y en el propio equipo ejidense de que la segunda parte cambiara el desarrollo del partido, no sucedió así. Si cabe fue a peor en lo que se refiere a la propuesta del conjunto local, con la continuidad de una clara inoperancia ofensiva, pese a sus tímidos y muy contados intentos de 'asomarse' al área del equipo nuciero, cuyo guardameta Valens pasó desapercibido, salvo en el mencionado disparo de Jorge García. Los tres cambios que hizo Fran Alcoy en el descanso no hicieron variar el panorama ni el rendimiento del equipo celeste.

Ante el escaso peligro celeste, los rojinegros lo tenían a 'huevo' para dar otro movimiento al marcador. Lo lograron en el minuto 70, al cabecear Mariano Sanz al fondo de las mallas. Con el 0-2, la impotencia local elevó más el desánimo en las gradas. No era para menos. Incluso pudo llegar el 0-3, en un disparo de Mariano Sanz, que neutralizó Godino.

Sin nada digno de mención, el pitido final. La imagen posterior era obvia, tanto en las gradas como en los jugadores celestes. No era para menos, no por perder ante el líder, que lo mereció con creces, sino por la pobre imagen ofrecida. Ahora toca 'sacarse la espina' el próximo domingo en campo del CD Eldense.