Hemos creado una sociedad que convierte el talento en campañas de marketing. Aún peor: una sociedad que sólo presta atención al talento que se convierte en marketing. Un actor formidable no consigue papeles hasta que se hace dueño de Tik Tok. Los goles de los futbolistas que no presentan a sus hijos en sociedad tienen menos minutos en los informativos. Si no cuentas con miles de seguidores en tu canal de Youtube, no vales como escritor. Y el voto, más que por ideas o carisma, se consigue con un buen vídeo viral.
'The Boys' es una serie formidable. Y va sobre eso: superhéroes convertidos en productos. Ya saben: una empresa que gestiona a gente con poderes, como si fueran estrellas del cine y la televisión. Gestionan su publicidad y, también, sus actuaciones heroicas. Basada en el cómic de Garth Ennus y Darick Robertson, 'The Boys' es una auténtico deleite narrativo para adultos. No hay una serie en el que sus protagonistas puedan volar o correr a la velocidad de la luz, más gamberra, cruda y salvaje. Creo que nunca un héroe, Patriota, el Superman de esta historia, me había dado tanto miedo.
Amazon, que cuenta con uno de los mejores catálogos de series originales, está a punto de estrenar la segunda temporada. En junio o julio, parece. Mi consejo es que no se la pierdan. Que se dejen engatusar por sus fantásticos personajes y por ese comienzo tan arrollador: una pareja enamorada pasea por la calle, distraídos, haciendo planes de futuro, cuando, de repente, ella explota en mil pedazos: el tipo más rápido del mundo se acaba de chocar con ella. Pero tranquilos, no pasa nada. Con la campaña de marketing correcta, será una mera anécdota que no salpicará a nadie... ¿O sí?
'The Boys', para disfrutar de esa verdad tan jodida que se esconde tras los héroes.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.