Ogíjares vive un Festival Flamenco como los de antes
La velada, que se alargó hasta las 4.30 de la madrugada, homenajeó a Antonio Fernández Díaz 'Fosforito' con una mención honorífica
JORGE FERNÁNDEZ BUSTOS
Lunes, 5 de septiembre 2022, 00:04
Para cuando cantó Pansequito, ya a las 4.30 de la madrugada, el aforo del Parque de San Sebastián del municipio de Ogíjares en su ... cuadragésimo tercer Festival ya estaba algo menguado. No obstante, un festival, con las grandes figuras del momento, se aguanta con agrado. Antiguamente, un festival flamenco era un escaparate donde se reunía la mayor parte de artistas para brindar al público en general la posibilidad de ver en directo a quienes solo habían escuchado en la radio o en discos de vinilo. Era una oportunidad sin límites. Que abarcara ocho o diez horas y acabara con los churros de la mañana no solo era habitual, sino también agradecido. Pero con los adelantos actuales y la oferta continua, a lo que se añade la mejora en las comunicaciones, un encuentro de ese formato está, como poco, trasnochado. Súmale a eso el ambigú en la parte de atrás, el trasiego de los cientos de asistentes (no todos con asiento, parece ser), el murmullo continuo o, más bien, el insoportable ruido de fondo desde principio a fin y los acoples múltiples de los micrófonos, para que la jornada, dentro del sobresaliente, sea criticable.
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Fueron cinco cantaores con sus respectivos guitarristas y una bailaora con su cuadro. Hasta ahí bien. Además, un cartel de verdadero lujo lo justifica. Con un par de temas cada uno y algún regalo, la noche se alargaría, pero soportablemente. La sorpresa fue cuando el primer cantaor Caracolillo de Cádiz, después de un merecido homenaje a Fosforito, a sus 90 años, allí presente, abrió la noche con cuatro cantes (alegrías, soleá, tangos y bulerías), más unos supuestos fandangos a capela cantados para las tres primeras filas.
El cante
Mayte Martín, con un cante más racional y preciosista, se limitó a los cuatro temas (cantes mineros, granaína y abandolaos, soleá y bulerías con cuplé). Luis Heredia 'el Polaco' llegó a confesar que no lo llamaba nadie desde hacía ocho años, así que se desquitó llegando a hacer hasta siete cantes (zambra, 'Carcelero', granaína, canción por bulerías, tangos de Granada, 'La Estrella' de Morente y 'Tres puñales' por bulerías), acompañado por la guitarra de Paco Cortés y el teclado de Laura de los Ángeles.
Tras un descanso que se alargó algo más de la cuenta para preparar el escenario, Alba Heredia, arropada por parte de su familia, ocupó sus buenos minutos en un baile por soleá marca Maya, que arrancó aplausos apasionados. Los platos fuertes llegaron ya a última hora. Aurora Vargas, con su voz abierta y canastera, bordó alegrías, soleares, tangos y bulerías, más una arrebatadora toná a petición del público. Pansequito, con un carisma especial y una entrega absoluta, fue previsible sin embargo cantando unas alegrías, mostrando sus credenciales por levante, rebuscándose en la soleá y coronándose en las bulerías tan particulares que compone. El gaditano cerró la noche con una gavilla de fandangos naturales.
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Ofició de presentador del espectáculo Antonio Conde González-Carrascosa, mostrando soltura y conocimiento. Ni que decir tiene que todos los cantaores tuvieron palabras amables para don Antonio Fernández Díaz 'Fosforito' en esa mención honorífica especial de uno de los festivales flamencos más carismáticos de España.
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