El arte como destino y un mismo origen: Vilches

A sus 45 años Alberto Conejero López, ha vivido un intenso 2023. El dramaturgo que en 2016, obtuvo el Premio Max de Teatro a la mejor creación original por 'La piedra oscura' y que en 2019 recibió la más alta distinción para un autor del arte de escenificar historias, situaciones y conflictos humanos, el Premio Nacional de Literatura Dramática por 'La geometría del trigo', un proyecto íntimamente ligado a su Vilches, ganó el pasado verano el Premio Ideal del Año en la categoría de Cultura. Aquel día, el salón Guadalquivir del Palacio de Feria y Congresos Ifeja disfrutó de una ceremonia en la que el periódico decano de Jaén ensalzó su trayectoria y vinculación permanente por y para la provincia, mientras que el dramaturgo recordó desde la gratitud otra de sus obras vinculadas a Jaén, 'Los días de la nieve', que aborda la relación entre la quesadeña Josefina Manresa y el poeta alicantino fallecido en 1942 en la prisión de Alicante.

El pasado uno de diciembre Alberto Conejero recibió de manos del Rector de la Universidad de Jaén, Nicolás Ruiz, en el El Teatro Miguel Hernández de Vilches, el premio Natural de Jaén «por ser un referente de la nueva literatura nacional y una voz que se adentra en las nuevas sendas creativas con miradas y luces largas que nos ayudan a entender la vida, porque nos incita a pensar y a replantearnos esa vida», expresó el rector quien dijo también que leer a Alberto Conejero es internarse en un espacio lleno de preguntas trascendentales a las que la Humanidad se ha enfrentado desde el principio: «Nos proporciona una visión de la vida con una notable coherencia formal e ideológica. Para él, la dramaturgia sirve para examinar el mundo con ojo crítico y para imaginar utopías». Conejero celebró que el acto de la UJA se realizase en su Vilches natal, un gesto de apuesta y confianza por los pueblos y municipios de Jaén: «Humildemente considero que este reconocimiento lo es también a la mirada humanista, a una mirada que rescata la belleza allí donde se puede, una mirada también crítica, activa y comprometida con su tiempo y con su tierra».

Esta tierra de la que habla el dramaturgo descubrió hace unos días una placa que certifica como una horma enclavada en la vilcheña calle Pastores en la que vivieron sus abuelos maternos y en la que el mismo escritor ha llegado a sentarse para escribir algunos pasajes de su producción literaria, pase a tener nombre propio: 'Horma de Alberto Conejero'. El escritor valoró un gesto tan sencillo, tanto que no dudó al manifestar que se trata del vínculo más poderoso que tiene con su tierra: «De niño pasaba horas sentado en el poyete contemplando el pantano, el mar de olivos, el vuelo de los vencejos, las golondrinas. Ahí empecé a forjarme como escritor».

Entre tantos reconocimientos su obra continúa llegando a más público. Además de estrenar una producción en Italia de 'Todas las noches de un día' y llevar su montaje 'Ushuaia' a Montevideo (Uruguay), también estrenó en el Festival de Mérida 'En mitad de tanto fuego', una lectura personalísima de la 'Ilíada' de Homero, y hace un par de meses México conoció 'Leonora: oratorio sonámbulo en las tierras de España', su aproximación a la biografía y obra de la pintora Leonora Carrington.

No todo han sido flores, sin embargo, para este licenciado en Dirección de Escena y Dramaturgia por la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid y doctor en Ciencias de las Religiones por la Universidad Complutense de Madrid, que desde 2020 ocupa el cargo de director artístico del Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid. El Ayuntamiento de Briviesca (gobernado por el PP con el apoyo de Vox y de Ciudadanos) canceló la representación de la obra que codirigía con su marido Xavier Bobés 'El mar: visión de unos niños que no lo han visto nunca' con la que homenajeaba a Antoni Benaiges, un maestro de la Bureba (Burgos) que prometió a sus alumnos que en verano les llevaría a Cataluña para conocer el mar, pero no pudo cumplir su promesa porque fue fusilado en julio de 1936. El alcalde del municipio (6.000 habitantes), José Solas, aseguraba que la cancelación estaba relacionada con la seguridad del espacio, el caché de la obra y no tener relación con el asunto que abordaba esta pieza, que ha posteriormente llegó a ser finalista a mejor dirección de escena en los Premios Max de este año. Alberto replicó de forma contundente: «Decidí hace años que sería más útil luchando por los valores y compromisos con el trabajo, preguntando y protestando allí donde podía ser escuchado, tratando siempre de argumentar mis posicionamientos». El dramaturgo argumentaba que «todas las decisiones que ha tomado estos años, aun con las contradicciones inevitables de cualquier vida, han sido desde la lealtad a estos valores y en defensa de lo común diverso. Y eso incluye esta obra ahora cancelada. Es el momento de afrontar juntas y juntos la situación inquietante de nuestro país, exigiendo a todas las administraciones la salvaguarda de la libertad de expresión, el acceso a la cultura y el respeto a las compañías y espectadores».

2023 ha sido el año más importante en la trayectoria profesional del coreógrafo y bailarín vilcheño Mario Bermúdez Gil. En el calendario una fecha señalada, lunes 17 de abril. Aquella noche, en el Falla de Cádiz, recibió el Premio Max de las Artes Escénicas en la modalidad de Mejor Intérprete Masculino de Danza por 'El Bosque', que había tenido su estreno absoluto en el Teatro Infanta Leonor de Jaén. En esa XXVI edición de los premios que otorga la Fundación SGAE, considerados los más prestigiosos de España en la modalidad del teatro y la danza, Marcat Dance, la compañía vilcheña que lideran Mario Bermúdez y su mujer la bailarina estadounidense Catherine Coury, consiguió también 4 nominaciones como finalista a mejor espectáculo, coreografía, composición musical e intérpretes femenino. Mario recibió el premio, una manzana redonda y plateada del tamaño de un puño con un antifaz dorado que simboliza la dimensión dramática y el misterio escénico del teatro y la danza, desde la emoción, sin estirar el minuto de cortesía y con El Falla rendido al aplauso. Mario tuvo palabras de gratitud para los suyos: «Es un honor estar aquí recibiendo este premio que quiero compartir con todo el equipo de Marcat Dance, en especial con mi mujer Catherine Coury por estar a mi lado, ser un gran pilar inspirador como madre, codirectora, asistente y amiga, te quiero».

'El Bosque', obra cumbre del bailarín vilcheño, un espectáculo íntimamente relacionado con la naturaleza en el que Mario y Catherine, acompañados por la bailarina italiana Marilisa Gallicchio, indagan en el movimiento de los animales explorando el peso de sus propios cuerpos en relación a la gravedad, (anteriormente ya había ganado dos Premios Lorca en la VIII edición de los galardones que concede la Academia de las Artes Escénicas de Andalucía), no fue el único montaje de Marcat Dance a lo largo del año. El pasado mes de noviembre El Teatro Romano de Itálica, de Sevilla, acogió el estreno absoluto de 'Averno'. Siete bailarines, Mario, Catherine y Marilisa entre ellos, tomaron el evocador escenario para ofrecer una creación inspirada en el descenso a los infiernos de Dante, una obra de enorme carga simbólica, llena de tensión, que obliga a un trabajo físico y emocional impresionante y que conlleva un gran despliegue de exigencia técnica.

Con diseño musical de José Pablo Polo, dramaturgia de Isabel Vázquez e iluminación de Mamen Gil, hermana de Mario, los 7 bailarines se desenvuelven en una atmósfera sombría e inquietante, magnificada por la música omnipresente, moderna, ritual y tribal de José Pablo Polo.

'Averno', el espectáculo más ambicioso de Mario Bermúdez, está llamado a prolongar los éxitos y premios a lo largo de 2024. Por ahora, en su corta vida ya ha obtenido tres primeros galardones en el Festival Artes Escénicas de Sevilla: Mejor Espectáculo de Danza, mejor bailarina Catherine Coury y mejor vestuario Moisés Nieto.

No hay límites para este joven de 36 años bailarín surgido de las entrañas del pueblo, de familia humilde, que tras estudiar en el Centro Andaluz de Danza en Sevilla (2008-2010), trabajó en la compañía de Jennifer Muller de Nueva York (2010-2011), en la Gallim Dance Company, también de Nueva York (2011-2012) y en la Batsheva Dance Company de Israel (2012- 2016). Tras este periplo profesional, Mario y Catherine decidieron fundar Marcat Dance y lo hicieron instalando la compañía en Vilches, decididos a vivir en el pueblo de Mario Adquirieron para ello una casa llena de cuevas que rehabilitaron hasta darle la estética que solo dos artistas saben otorgar. En Vilches, arropados por la familia que le echa una mano a la hora de llevar sus dos pequeñas al colegio y colaborar en lo que necesitan, preparan sus montajes creativos y programan los viajes que les lleva a cualquier parte del mundo.

En el pueblo Mario es profeta en su tierra. Con el respaldo de Ayuntamiento y Diputación su Festival de Danza Contemporánea Vildanza, la apuesta por una disciplina artística poco presente en una programación de cultura convencional, ha cuajado, así que cada mes de junio, por el escenario al aire libre del Mirador de la Esperanza, balcón abierto que mira a Sierra Morena, transitan las mejores compañías internacionales. Mario aduce que «en la tierra encuentro mis raíces, de ellas no me quiero desprender. El público de Vilches empezó virgen, pero ha subido peldaños, ya tiene principios y referencias para valorar la coreografía, los movimientos, el ritmo, sonido, luz, naturaleza y la música de la danza».