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Feria del Vinilo en Granada, la pasada edición. J. J. GARCÍA
La Feria del Vinilo: reencuentro hoy con la nostalgia musical

La Feria del Vinilo: reencuentro hoy con la nostalgia musical

Miles de discos cambiarán de dueño hoy en la Feria del Vinilo, que se celebra en el Hotel Recogidas con sus toneladas de 'elepés' y 'sencillos'

JUAN JESÚS GARCÍA

Granada

Domingo, 10 de marzo 2019, 01:18

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Fueron y son, han pasado de ser recuerdo y un gran regalo para el día del padre (o del abuelo) a ser actualidad. El disco de vinilo se fue, aunque no del todo, y ha vuelto, si bien tampoco del todo: «Es difícil que se establezca como hace años, entre otras cosas porque las multinacionales están cometiendo el mismo error que con el cd: vender la música que ya tiene superamortizada a unos precios muy altos», así lo piensa y dice Bartolomé Jaén, propietario de una colección de un cuarto de millón de ejemplares y fundador de la feria 'oficial' de los vinilos. Fue la primera que se organizó (hay más ahora) por toda Andalucía, y que a falta de que se concrete el 'Día del disco', proyecto que tiene el Ayuntamiento granadino en una mesa desde hace dos años, es la cita más importante de los 'vinileros' o 'vinilistas', o cómo se llamen los fanáticos de este formato.

«Me gustaría que en Granada tuviéramos las mismas facilidades que nos dan en ciudades como Sevilla o Málaga», comenta Jaén, en referencia a dos de sus citas que congregan a miles de aficionados «en Sevilla tuvimos más de 5.000 personas, con Málaga andamos por ahí, son las más potentes de Andalucía», comenta este promotor que se instalará este domingo con sus toneladas de 'elepés' y 'sencillos': «Traigo unos 30.000 ejemplares», recuenta.

El aumento de la demanda ha traído emparejada una mayor oferta, y más en la Red, con tiendas especializadas que han terminado siendo por mera acumulación de información (caso de discogs.com) el mayor catálogo que nunca ha existido de publicaciones discográficas en todo el mundo. Pero si bien uno puede encargar la edición filipina, por ejemplo, de sus discos favoritos, «nada vía internet se pueden comparar con el placer del contacto físico y sensible con un álbum, los dedos pasando portadas despacio en la gaveta, o el encanto de leer los créditos y datos en la contraportada sin necesidad de usar lupas de amento, o comentar tal o cual detalle de esa edición», asegura Bartolomé, que está muy contento porque «hay mucha juventud descubriendo este formato que yo adoro, y no hubieran descubierto el vinilo si no se hubiesen empezado a fabricar nuevamente tocadiscos, esa ha sido la clave: hay 'tocatas' y hay discos para alimentarlos. Esto ya no se para, que se pare el cedé, que ese sí que está acabado», concluye eufórico. A cedé muerto vinilo puesto.

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