Patrimonio de Granada

El edificio a medio construir del Carmen del Negro

Que levante la mano quien, en algún momento, no se ha asomado a la verja de acceso a la casa en ruinas situada junto al Palacio de los Córdova, en la Cuesta del Chapiz. Como a buen seguro usted no ha levantado la mano, lo que ha visto a través de la reja es un descampado cubierto de jaramagos y otras hierbas. Pues bien, esta finca fue propiedad de un señor que se llamaba Juan Latino (Cabra, 1518 - Granada, 1597), el primer negro que recibió estudios universitarios en Europa –fue poeta, humanista y catedrático de la Universidad de Granada–. Y detrás de esos arbustos se esconde un enorme edificio de 3000 metros cuadrados que se quedó a medio construir hace más de quince años, y cuyas obras se retomarán dentro de unos meses para albergar el Archivo Histórico Municipal.

IDEAL ha entrado en el Carmen de Juan Latino –más conocido como el Carmen del Negro–, con reminiscencias mudéjares, para adentrarse en el 'edificio fantasma' que se erigió unos metros adentro entre 2004 y 2007, diseñado por el afamado arquitecto Feduchi y que, tras la readaptación realizada por el estudio granadino Fresneda y Zamora, por fin quedará concluido a la vuelta de un par de años. Una intervención que tiene un coste estimado de 3,2 millones, de los que 2,5 serán aportados con cargo al Plan Alhambra –la Junta destina los ingresos del monumento a la mejora del patrimonio de Granada– mientras que los 700000 restantes serán apoquinados por el Ayuntamiento, en su condición de dueño del Carmen del Negro.

La cantidad de 3,2 millones no deja de ser orientativa, ya que es probable que la adjudicación se produzca por una cantidad inferior –por lo que el Consistorio tendría que liberar una partida más baja–. Si no hay mayores contratiempos, nunca descartables en este tipo de equipamientos, las obras comenzarán este verano y se prolongarán durante más de un año.

Según ha anticipado Ángel Toro, jefe del Servicio de Conservación de Edificios del Ayuntamiento de Granada, el proyecto global tendrá un coste de unos 6 millones de euros ya que, además de los 3,2 millones para rematar el Archivo, se acometerá la rehabilitación integral de la casa que da a la Cuesta del Chapiz y que se convertirá en un centro de recepción donde también se expondrán algunos documentos. Es decir, los trabajos se realizarán en dos fases. Para la primera, la del Archivo, ya está garantizado el dinero y para la segunda habrá que esperar hasta que exista disponibilidad presupuestaria.

El Archivo, que guardará el vasto patrimonio documental que hoy día se custodia en el Palacio de los Córdova, se detuvo cuando se hallaba a más del cincuenta por ciento de su ejecución. Se realizaron los cimientos, el alzado y los cerramientos. También la espectacular terraza con vistas a la Alhambra que se transformará en un espacio verde, que se mimetizará con el entorno, compartimentado en jardineras. Todo esto se quedó hecho en 2007.

Pero hay faena por delante. Están pendientes todos los servicios, todos los acabados y todas las cristaleras. También, lógicamente, todo el mobiliario que se precisa para que aquello sea el Archivo Histórico Municipal. Tendrá una biblioteca, una zona para los investigadores, seis grandes salas donde se almacenarán todos los archivos, un gran pasillo que distribuirá los distintos despachos y otras estancias donde se colocarán, por ejemplo, las cajas fuertes donde se guardarán las piezas de mayor valor como la impresionante colección de grabados de Goya que pertenecen al Ayuntamiento.

Pero el Carmen del Negro no solo será la sede del Archivo Histórico de la ciudad. También será un espacio con un enorme significado histórico. El arqueólogo Ángel Rodríguez, que realizó las excavaciones en 2004, explica que el Carmen de Juan Latino fue originariamente, a principios de siglo XIV, una almunia que se extendía en tres terrazas: donde se hallan las Escuelas Ave María, lo que hoy conocemos como el Carmen de Juan Latino y el Palacio de los Córdova. Hay historiadores que apuntan a que esta hacienda también fuera titularidad del gran visir Ibn al Jatib –al igual que la que hubo en Cartuja–.

Según Rodríguez, estas tierras tenían la consideración de 'huertas de primor'. Es decir, además de los cultivos propios de esa época, como los árboles frutales, y hortícolas, como las alcachofas, también estaban habilitados como jardines para el recreo. Los estudios acometidos por Ángel Rodríguez también documentaron vestigios anteriores, concretamente almohades, como los restos de un molino. De hecho, este molino se identifica en la famosa Plataforma de Ambrosio de Vico de finales del XVI. De aquellos bancales medievales aún se conservan parte de los muros de contención.

El espíritu del humanista Juan Latino nunca abandonó la Cuesta del Chapiz. Ahora morará, a buen seguro, en las habitaciones del Archivo Histórico Municipal.

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