Restauran los salazones romanos y los lienzos islámicos de Puerta de Almería

Con una inversión de 30.000 euros, se ha ejecutado la limpieza de estructuras arqueológicas verticales y horizontales de cara a su posterior consolidación, según confirmaron a Europa Press fuentes del Gobierno andaluz.

El proyecto para la consolidación de este espacio apuntaba ya al deterioro provocado en los restos arqueológicos a causa de la humedad debido a que el inmueble que los alberga carece de las condiciones climáticas adecuadas porque los niveles de temperatura y humedad no son estables, lo que favorece la formación de sales y su cristalización.

De hecho, la elevada humedad es la responsable de la mayoría de las patologías contra las que se ha actuado. Fundamentalmente, se ha trabajado para eliminar eflorescencias salinas tanto en los paramentos verticales como en los horizontales, tanto en la muralla como en las piletas, ya que habían provocado una arenización y disgregación de los materiales que dio lugar a una pérdida de volumen constante que hacían peligrar los materiales originales.

En el caso de la muralla, la erosión a causa de la salinización había dado lugar a la aparición de fisuras y oquedades en zonas puntuales, mientras que en el caso de las piletas, además de la descohesión, desprendimientos y pulverulencia de los materiales constitutivos se apreciaron manchas negras en el fondo de las mismas debidas a microorganismos.

Para acabar con estas problemáticas, se ha llevado a cabo una limpieza superficial para retirar todas las sales y depósitos ajenos al conjunto mediante un cepillado suave, con especial atención en las zonas más deterioradas, explicaron desde la Administración. Asimismo, se ha realizado un primer tratamiento para preconsolidar todos los lienzos y evitar así la pérdida de materiales en el proceso de restauración, conforme al proyecto al que la Comisión Provincial de Patrimonio dio su visto bueno.

Hecho el proceso de desalinización, se ha trabajado para consolidar las superficies a través de un tratamiento que las preserve de la humedad al tiempo que se han retirado morteros inadecuados para aplicar en su lugar un nuevo revestimiento de cal y arena para asegurar la estabilidad del material original.

Los restos de la muralla califal de Almería fueron hallados en el año 1984, cuando se realizaban movimientos de tierra para la ejecución de la cimentación del Edificio Puerta de Almería. Un hallazgo que dio lugar a la paralización de las obras y a una consecuente excavación de urgencia durante la que se encontraron, además, las balsas de salazón. Se trata de la primera estructura romana aparecida en Almería capital.

Aparte de su contenido histórico, la importancia de este enclave arqueológico, destacan desde laJuna, radica en que fue la primera excavación urbana que se hizo en la ciudad de Almería, lo cual generó un intenso debate social en torno a la conservación de estos restos. El enclave Puerta de Almería se puede visitar sin necesidad de cita previa dentro del horario de apertura.