El legado bereber se expone en la Alhambra

La historia de Granada está ligada a los ziríes y con ellos al mundo bereber: ellos fundaron el que sería el primer reino independiente que conoció la historia de Granada y establecieron aquí la capital prefiriéndola a Elvira que había sido hasta entonces la capital de la cora. La ciudad experimentó un desarrollo vertiginoso. En torno a la Alcazaba Cadima levantaron sus palacios, mezquitas, redes de acequias y mercados. Las calles del Albaicín están jalonadas de testimonios de aquella época: Bab Qastar, las puertas de Monaita o de las Pesas, los restos del Puente del Cadí, el alminar de la iglesia de San José o el Bañuelo son excelentes ejemplos.

Los amazigues, como también se conoce al pueblo bereber, contribuyeron a la construcción de la civilización islámica. Explicar las conexiones entre estos dos pueblos y la herencia cultural recibida, es el objetivo de la muestra 'La Granada zirí y el universo bereber' que organiza el Patronato de la Alhambra, la Fundación Legado Andalusí y el Consejo de Europa, en colaboración con la Fundación Doctora Leila Mezian de Marruecos, y que abrirá sus puertas el próximo 5 de diciembre. Es una exposición única que, comisariada por Antronio Malpica, reunirá en la capilla del Palacio de Carlos V, piezas de museos como el Louvre, el arqueológico Nacional o el de la ciudad Argelina de Setif, junto con objetos de la colección de la mecenas marroquí Leila Mezian Benjelloun.

Culmina así un proyecto que llevaba fraguándose varios años y que concretó la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, en el transcurso de una visita que realizó a Marruecos el pasado mes de junio donde destacó la colaboración de Leila Mezian Benjelloun al aportar sus fondos que muestran la tradición y la historia del pueblo bereber.

La Alhambra es sin duda el marco perfecto para reunir, por primera vez, una exposición dedicada al conocimiento de esta milenaria cultura, desde sus orígenes a nuestros días, y a los lazos que nos unen que se han prolongado durante centurias: «El canal mediterráneo no es una barrera líquida que se levante entre la masa continental del mundo ibérico y la del mundo norteafricano, sino un río que une más que separa, que hace del África del Norte y de Iberia un solo mundo», explica el tríptico de esta exposición citando al historiador francés Fernad Braudel.

La fascinante colección de la Fundación Doctora Leila Mezian es una parte muy importante del recorrido que articula la muestra por la historia de estos pueblos procedentes del norte de África, cuya influencia se extendió desde el oasis de Siwa, en el oeste de Egipto, hasta el océano Atlántico y desde el Mediterráneo hasta los límites meridionales del Sáhara. Una diversidad geográfica y cultural unida por una lengua común, el tamazig, en todos sus dialectos, y la conciencia de un legado colectivo.

La Fundación Doctora Leila Mezian es una referencia en la conservación, el estudio y el legado de la herencia cultural bereber. Gracias a ella la Euroárabe granadina cuenta con una Cátedra Internacional de Cultura Amazigh, y una biblioteca multilingüe, que lleva el nombre de la doctora. Además su compromiso se ha materializado en foros, encuentros internacionales y exposiciones que se llevan celebrando en la ciudad varios años.

Esta colección traerá a Granada piezas domésticas, joyas, armas, enseres, piezas de artesanía, elementos arquitectónicos y tejidos. Se exponen objetos para dar a conocer la cultura material asociada a este momento histórico, tanto en la taifa granadina, como en otros centros de poder, así como objetos tradicionales del pueblo amazigh. Entre los objetos que se expondrán, hay muestras de la producción textil de las tribus imazighen de la colección de Mezian, así como puertas de granero decoradas con motivos bereberes o piezas de cerámica procedente del Louvre. El Museo Nacional de Sétif, en Argelia, ha aportado objetos como ornamentales como muqarnas, que recubrían cubiertas o una boca de fuente con forma de león agazapado, o la catedral de Narbona que ha cedido un bote de marfil del siglo XI, un delicado objeto cuya función original sería la de contener joyas, perfumes u otros enseres reutilizado para culto cristiano. Hay una escápula de bóvido, de Ciudad de Vascos, en la provincia de Toledo, un yacimiento arqueológico islámico que estuvo habitado entre los siglos IX y XIII, que se cree que se utilizaba para fines didácticos para aprender árabe, a modo de tablilla de escritura y por señalar algún otro ejemplo, un curioso huevo de avestruz, vaciado y cortado en la parte superior que proviene de la necrópolis de Villaricos, en Cuevas del Almanzora, y que formaba parte de un enterramiento púnico. El Museo de la Alhambra y el Arqueológico granadino, entre otros, han aportado también piezas a esta colección con objetos como lámparas, objetos cerámicos como el ataifor de caballo o un decorativo yamur.

El Patronato de la Alhambra está trabajando para que sea la reina Letizia la que inaugure esta muestra, al igual que lo hizo la reina Sofía en 1992 cuando presidió la inauguración de la exposición 'Al Ándalus', una de las grandes muestras que han pasado por el palacio árabe y que permitió contemplar reunidas por primera vez 130 piezas únicas del arte hispano musulmán. Los Reyes de España, Lech Walesa, Mario Soares, la Reina Madre de Inglaterra o Henry Kissinger, pasaron por Granada para ver una exposición que disfrutaron 300.000 personas. 'La Granada zirí y el universo bereber' permanecerá abierta del 5 de diciembre al 21 de abril de 2010 en la Capilla del Palacio de Carlos V.