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Un fotograma de 'Mascotas 2'.

'Mascotas 2', una divertidísima secuela para el Capitán Pompón y los suyos

En cartelera ·

Lo tiene difícil para derrotar a 'Toy Story 4', aunque son muchos los padres y madres que necesitan este tipo de estrenos para los más pequeños en plena época estival

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Jueves, 8 de agosto 2019

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'Mascotas 2' llega a la cartelera, segunda entrega de un filme de animación que atendía claramente en su momento a la popularidad de los animales de compañía en las redes sociales, retratando comportamientos grotescos y situaciones que hacen gracia al grueso de la audiencia por el mero hecho de existir y ser un perro, un gato o un conejo el protagonista. Internet está lleno de vídeos de esta guisa, entre la genialidad y el bochorno, grabados con el móvil, que son compartidos aquí y allá sin orden ni criterio. Si en la saga 'Toy Story' somos testigos de lo que ocurre en el cuarto de los juguetes cuando los dueños no están cerca, aquí vemos hacer cosas de humanos, como agitar la cabeza al son de la música death metal en la intimidad del hogar, a unas mascotas parlanchinas que se meten en algún que otro lío. Detrás de la propuesta está Illumination, los mismos estudios que inventaron a los famosos minions, esa criaturas amarillas con anteojos, cruce entre un gremlin y un pitufo. Dirige Chris Renaud, encargado de 'Gru: Mi villano favorito' y 'Lorax: En busca de la trúfula perdida', junto al debutante Jonathan del Val.

Lo tiene difícil 'Mascotas 2' para derrotar a 'Toy Story 4', divertida a rabiar. Comparten fechas en el circuito de exhibición, aunque son muchos los padres y madres que necesitan este tipo de estrenos para los más pequeños en plena época estival. La primera entrega funcionó estupendamente en taquilla con una recaudación de 875 millones de dólares en todo el mundo, con lo cual era de esperar una continuación no tardando mucho. «La primera entrega de 'Mascotas' tocó algo en el público porque trataba de mascotas», señala Renaud. «Nos esforzamos en captar a los animales tal como son, tanto en su forma real como en la animación. Además, la pregunta de qué hacen las mascotas cuando no estamos en casa era sencilla y atractiva: nadie puede resistirse a ver una película que intenta contestar a semejante enigma». Esta vez Max, el can protagonista, pasa por el síndrome del príncipe destronado. Su dueña es mamá y llega la competencia al hogar. El déficit de atención engendra monstruos, ya se sabe. Pero finalmente surgen los buenos sentimientos.

Combatir contra tus demonios internos, nuestros miedos (aquí proyectados en divertidos seres peludos), aunque seas una mascota, es el leitmotiv de una película coral donde destaca una vez más el Capitán Pompón, el conejo blanco enmascarado. El genial justiciero, pequeño pero matón, se lleva algunos de los los momentos más divertidos de una apuesta que repite esquemas respecto a la cinta original, apuntalando el mensaje de amor hacia esas criaturas que alegran más de un hogar y existencia. Como cambio importante, en esta ocasión los protagonistas se relacionan con un pequeño humano. «No tardamos en darnos cuenta que serían estupendo ver cómo florece la relación entre un niño y una mascota, evolucionando hasta convertirse en auténtico cariño», explica el director principal. «Gran parte de la historia se basa en experiencias propias de varios de nosotros. De pequeño tuve una setter llamada Shammy. Cuando estaba conmigo o con otros niños era la perra más tranquila y cariñosa del mundo».

Un fotograma de 'Mascotas 2'.
Un fotograma de 'Mascotas 2'.

«Reconozco que hacer este tipo de película se convierte a menudo en una terapia para mí», explica uno de los productores. «Intento resolver mis problemas personales en la medida de mis posibilidades, y creo que lo mismo les pasa a mis compañeros. Nuestras apreciaciones personales están en la historia. Comprendo muy bien a Max porque luché para encontrar el equilibrio entre ser un padre increíblemente solícito y darles a mis hijos el espacio suficiente para que desarrollaran su independencia. El miedo nos impide dejar que nuestros hijos se adentren en el mundo, incluso si ese mundo es solo un parque infantil». Max debe emprender un camino que le permitirá conquistar sus temores y tener más confianza en sí mismo.

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