La Junta aprueba un nuevo decreto de sequía ante una situación que está llegando «al límite»

El nuevo decreto, dotado con 217 millones de euros, prevé actuaciones centradas en la recuperación de sondeos y la desalación, además de abrir una vía de colaboración con las diputaciones provinciales para paliar las fugas existentes en la red. Con este nuevo decreto, las actuaciones de la Administración andaluza para combatir la sequía superarán un total de 500 millones de euros de inversión.

El decreto también pone el foco en las aguas regeneradas para garantizar el suministro a los sectores productivos. En total, se prevé que con estas medidas se podrá disponer de unos 81 hectómetros cúbicos adicionales.

A pesar de ello, la consejera no dudó en reconocer que se ha llegado a una situación límite, en la que el Gobierno andaluz está actuando al máximo de sus posibilidades. «Estamos en emergencia y actuando a todo el límite de lo que podemos», reconoció.

Asimismo, se incluyen ayudas a través de líneas directas, exenciones fiscales y nuevas infraestructuras para aportar la conexión a las aguas regeneradas a los regantes y agricultores. Se incluye también una línea específica, por valor de 50 millones de euros para la recuperación del potencial productivo para los cultivos más afectados por la falta de agua, mientras que para la ganadería se mantiene la excepción para la alimentación convencional del ganado ecológico por la situación de sequía.

En la Junta consideran que todo este esfuerzo no tiene correlación con el escaso compromiso demostrado hasta ahora por el Gobierno de España. El portavoz del Ejecutivo andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, lamentó que el problema de la sequía no figure ni en el discurso ni en la agenda del gobierno de España, y volvió a reclamar compromiso con las obras que le corresponden por su titularidad sobre la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que ocupa dos tercios de la superficie hídrica de Andalucía.

El Gobierno andaluz aspira a que la Unión Europea reconozca la situación de la comunidad como territorio de especial exposición a la sequía y el impacto que esta tiene en la economía, lo que le permitiría acceder a fondos específicos para obras hidráulicas y con ese objetivo el presidente, Juanma Moreno, inicia este martes una visita de tres días a Bruselas en la que intentará avanzar en ese objetivo.

Moreno se reunirá con el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Maroš Šefčovič, comisario de Pacto Verde Europeo, Relaciones Interinstitucionales y Prospectiva y asistirá también a diferentes encuentros del Comité de las Regiones, entidad de la que es vicepresidente.

Esta visita institucional ha sido criticada por el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, quien la considera una «huida hacia adelante» y una forma de eludir la responsabilidad, ya que en su opinión el combate a la sequía en Andalucía no padece por falta financiación, sino por una mala gestión del Gobierno autonómico.

Para el líder socialista, además, Moreno se enfrentará en Bruselas a un problema de falta de credibilidad por haber impulsado meses atrás el proyecto de ley para la regularización de regadíos. Esta iniciativa desembocó posteriormente en el acuerdo entre la Junta y el Gobierno de España para la reconversión de la zona.