Una empresa almeriense crea el primer crucero roquero de España

Esta es la idea que conforma el primer crucero temático de Rock de España, que nace en Almería de la mano de la unión de sinergias del presidente de Viajes CEMO, Santiago Martín, la empresa naviera Iberocruceros y la productora D.C. M. Promotions, de Diego Cruz, la voz del legendario grupo almeriense Teddy Boys, entre otras bandas del panorama nacional.

Este viaje a los años cincuenta que recorrerá a bordo de un navío el Mar Mediterráneo del 23 al 29 de septiembre, parte de Valencia y visitará las regiones de Sicilia y Cerdeña y las ciudades de Nápoles y Roma. «La idea surgió hace un año entre la conjunción de la producción musical y la turística», dice Santiago Martín, presidente de Viajes CEMO, empresa almeriense cuya oficina central se encuentra actualmente en el municipio de Roquetas de Mar.

A pesar de ser su primera edición y del handicap que supone ser un crucero temático y especialmente diseñado para los amantes de la música, y más concretamente, del rock de finales de los años 40 y principios de los 50, ya hay más de mil personas que han reservado su plaza. De ellos, más de 300 pertenecen a Andalucía Oriental.

Entre los que se han apuntado, según los organizadores, no existe por el momento un perfil determinado de personas. «La música rock atrae a gente de todas las edades, sin contar de que no deja de ser una buena manera de pasar unas vacaciones, lo que ha hecho que haya gente que se ha animado a traer a su familia, hijos... etc.», subraya Martín.

El plazo para inscribirse tiene como fecha límite el final del mes de agosto. Hasta entonces ya está cubierto más de la mitad del aforo del navío, cuya capacidad es de dos millares de personas. Una verdadero éxito en palabras de los organizadores que están «contentísimos e ilusionados» por la gran acogida que por el momento está cosechando este Rockin' Cruise.

Su secreto: el precio. «Desde 350 euros, que en realidad es mucho menos ya que más de la mitad son tasas, se puede disfrutar de toda una semana de pensión completa con bebida incluida en las comidas, todas las comodidades del barco, las maravillosas ciudades que se visitan y de, como no, las prestigiosas bandas y pinchadiscos que conforman el cartel», explica el presidente de Viajes CEMO que, anima a los almerienses a que se embarquen, nunca mejor dicho, en esta aventura 'rockanrolera' de tupé y patillas de una semana de duración.

Festival

La idea es, según Diego Cruz, «transportar el formato festival a un barco que recorre el Mar Mediterráneo». Una manera original de disfrutar de unas vacaciones viajando a bordo de «un maravilloso trasatlántico» y con toda la diversión que un encuentro musical de la magnitud de un festival ofrece. Si por si esto no fuera poco, el tipo de música elegida goza de muy buena salud en la actualidad.

El cartel, según su responsable, Diego Cruz, ha sido confeccionado para cubrir todos los espectros que componen este tipo de rock: rockabilly, swing, surfing, rocking blues, entre otros. Según el gerente de D.C. M. Promotions, los artistas que estarán a bordo, nueve bandas y cuatro pinchadiscos, son de primer nivel y a pesar de contar todos -a excepción de Oona Fortune, que es irlandesa-, con pasaporte español son artistas reconocidos internacionalmente. y casi todos viejos conocidos de la escena almeriense, unos porque están afincados en la provincia y otros porque ya han formado parte del festival de Rock & Roll más conocido de Almería, el Desert Wind.

Pero la relación con el rock no acaba con las actuaciones de estas bandas y 'deejays'. En el barco habrán dos profesores de danza para enseñar los principales pasos clásicos para estar a la altura en la pista de baile. También se han habilitado diversas actividades, como un trivial temático o un karaoque, el cual animará a los presentes a reinterpretar con su propia voz los clásicos del género. Además de fiestas temáticas en la cubierta del barco. Y todo estará conducido por el cómico almeriense Pepe Céspedes, que será el maestro de ceremonias.

Pero no solo del rock vive el hombre, además por las mañana se han preparado numerosas actividades fuera del barco y que coincidirán con las diferentes escalas que haga. Así, al llegar a Palermo, los pasajeros se adentrarán en la isla de Sicilia y podrán conocer sus pueblos y costumbres, degustando el licor fruto de los limones sicilianos, el conocido como Limoncello.

De ahí la siguiente parada se hará en la ciudad de Nápoles, bajo la mirada del volcán Vesubio y las ruinas de la ciudad de Pompeya, y desde Civitavecchia se llegará a la capital de Italia, Roma. Al final, antes de regresar al Puerto de Valencia, en Cagliari se hará un alto en la isla de Cerdeña. Toda una experiencia que promete perdurar en el tiempo. Los organizadores así lo prometen: «El año que viene ya estamos preparando nuevas rutas y la incorporación de bandas de corte internacional», cuenta Martín, que ya piensa de que lado se va a colocar el flequillo y a que barbero irá para que le enfile las patillas.