Aguirre defiende que «la corrupción ha salpicado a todos los partidos»

Posteriormente, se centró en la situación política, como corresponde a que «estamos a cinco semanas de unas elecciones generales y a dos meses de las europeas», añadiendo que «es un momento delicado, nos enfrentamos a algo que no habíamos visto en 40 años con el bipartidismo». Aguirre reconoció que «me parece preocupante que el Gobierno que ha convocado estas elecciones fue investido con el apoyo de independentistas y 'podemitas', esos que han ayudado a que Venezuela haya pasado de ser el país más rico de Europa a un lugar terrorífico sin luz, comida ni medicinas».

Para Esperanza Aguirre, hay una clara estrategia por parte del ejecutivo de «hablar de sacar a Franco de la tumba, la eutanasia o la violencia de género, porque de economía no pueden hablar», sin embargo «hace unos días se celebró el Día Internacional de la Mujer y no se habló una sola palabra de las mujeres que son torturadas o que sufren a manos de sus maridos». Sobre el nuevo marco político, la conferenciante reconoció la complejidad de «tener un presidente que ha sido el que menos votos ha sacado de la historia del PSOE», añadiendo que «Sánchez dijo que su programa de gobierno era convocar elecciones de inmediato y al final se ha visto que no ha sido una moción de censura, el objetivo era echar a Rajoy».

La crisis económica ha sido clave en el devenir de España, según Aguirre, porque «Zapatero no supo atajarla como sí se hizo en otros países como Alemania o Inglaterra», a lo que sumó la corrupción «que ha salpicado a todos los partidos políticos», lo que ha motivado que «los ciudadanos se hayan deprimido mucho». De igual forma, Esperanza Aguirre puso en énfasis en que «no se está sabiendo bajar las altas cifras de paro, encima lo que se propone es subir el gasto público y generar más déficit, pero no hay medidas que incentiven la creación de empresas y empleo».

También se mostró muy crítica, precisamente, con el modelo laboral español, ya que «se habla mucho de los despidos, pero no de una mayor flexibilidad en la contratación, como ocurre en los países anglosajones. En 2008 en Madrid había menos paro que en Alemania, ahora allí tienen pleno empleo y en Madrid hay un millón de parados».

Estando en la UAL, no podía faltar la reflexión sobre el estado de la educación, para lo que hizo memoria recordando que «yo propuse dejar de mirarnos el ombligo y que en el sistema educativo tuviésemos una visión más amplia de España y el mundo. El sistema sigue adoleciendo de esto, puse sobre la mesa un plan de estudio común, pero éramos un gobierno que estábamos en minoría y entendimos que este tipo de temas no se puedan sacar adelante mediante Decreto Ley».