Bares de Almería

Cierra Casa Puga, pero será (por suerte) por poco tiempo

Pero ni un establecimiento tan emblemático y cuyas puertas han cerrado en contadas ocasiones, puede estar abierto indefinidamente, y en esta ocasión ha tocado apagar la plancha. Pero tranquilos, nadie va a quedarse sin su tapa predilecta por mucho tiempo, será solo hasta el sábado, cuando está prevista su reapertura tras alargarse más de la cuenta una pequeña intervención en las entrañas del local.

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Así lo relata a IDEAL José Ángel Pastor, actual responsable de Casa Puga tras las decenas de personas que lo fueran antes, y que explica que se trata de meras «labores de mantenimiento» y una pequeña reforma, «fundamentalmente de la cara interna de la barra, de todas las zonas de trabajo, aprovechando para renovar la electricidad, la fontanería, los desagües, los azulejos, el suelo, que estaba muy deteriorado del uso, y bueno, entendimos que cerrar unos cuantos días antes de Semana Santa y después de las Navidades, los días justos que mejor nos podía convenir».

Pero se trata, a fin de cuentas, de una reforma sencilla que va a mantener inmutable su emblemática estética. «No va a cambiar en nada la estética ni nada de la percepción de los clientes habituales», detalla José Ángel. Una mano de pintura que, con la apertura diaria del establecimiento, es complejo llevar a cabo por la suciedad, «y hay que hacerlo a puerta cerrada». Al principio la idea era tardar una semana, pero las obras «ya se sabe que es cuando empiezas y no cuando terminas y, de estar previsto el lunes pasado, abrirá el sábado. Pero ya estamos terminando, así que ya es cuestión de limpiar, poner esto en orden y empezar con la actividad de nuevo», esclarece el responsable. 

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Un cierre relativamente largo que, desde la última reforma y salvando en la época del covid, que fue por obligación, no se había producido, «al menos que yo tenga conocimiento hace ya bastantes años, salvando una pequeña reforma de dos días de cierre, pero por lo que tiene entendido, de cierre sostenido no se daba desde los años 80», esclarece este. De la mano de esta pequeña gran renovación, «hemos sustituido los mármoles, las mesas de trabajo, las zonas de la barra, los expositores de refrigeración, todo eso se ha puesto nuevo, los frigoríficos, los botelleros, menos la plancha, que es la misma», por lo que seguirán rodando los kilos de carne y pescado por su superficie cada semana. «Nos propusieron cambiarla y nos trajeron varias propuestas y catálogos, pero simplemente se a mandado a limpiar», finaliza.