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NEREA ESCÁMEZ
ALMERÍA
Lunes, 24 de septiembre 2018, 02:11
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Con motivo del día de la Policía Nacional, se han reunido en la Plaza de Toros de Almería en torno a los 3.000 escolares pertenecientes a 35 centros educativos. Todos iban entrando poco a poco y en orden para coger sus asientos a la sombra. El día se tornaba caluroso pero no importaba porque había emoción para ver la exhibición en el ruedo. Los aplausos y la alegría se podía ver en cada uno de los niños que tomaban sus asientos. Estaban expectantes por ver lo que tenía preparado la Policía. Y no tardaron en aparecer. Mostrando sus motos, vehículos y furgonetas, iban enseñando su forma de trabajar a cada uno de los presentes. Pero la emoción llegó cuando aparecieron las Unidades de Prevención y Reacción (UPR), uno por uno, fueron demostrando sus habilidades y la manera en la que se desenvuelven en caso de haber algún problema. Los gritos de los jóvenes llegaron cuando emplearon el uso de las armas con corchos para demostrarlo. Había un fuerte estruendo y además, el despliegue estaba dejando a cada uno de ellos con la boca abierta hasta que desaparecieron con un bote de humo. Pero después de las demostraciones, llegó el entretenimiento, la mejor parte para todos los alumnos de los centros.
Los Guías Caninos llegaron acompañados con los perros y, demostraron todo el talento que desenvuelve a los animales. Desde izar la bandera hasta rastrear o quedarse parados en el centro a la espera de la llamada de los policías que trabajan con ellos. Todas las unidades iban realizando ejercicios sobre el trabajo que empleaban en su día a día y, aquel acto fue una fiesta además de un aprendizaje para los jóvenes que apreciaban cada momento. Sin irse más lejos, en la Rambla, también había una exposición con carpas en las que se paseó el alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco, y las autoridades para su inauguración. En las carpas se podía ver, desde la Unidad de Subsuelo y Protección Ambiental, con sus propios trajes y instrumentos de trabajo, Unidad de Caballería, con todo lo propio para la monta de los caballos y la Unidad de Guías Caninos, allí, se podía conocer a Brutus, uno de los perros que se dedicaba a la búsqueda de cadáveres y con tan solo siete años, se podía admirar su destreza y su habilidad en el trabajo. Todo estaba medido al detalle para el disfrute y la admiración de los ciudadanos que pasaban por las carpas, admirando el helicóptero y drones. Herramientas que trazaban un día histórico para la Policía Nacional que mostraba un arduo trabajo a todo el mundo.
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