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Jueves, 22 de septiembre 2022
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La prostitución genera en España 4.100 millones de euros en beneficios al año, lo que supone según estima el Instituto Nacional de Estadística (INE), el 0,35% del PIB español. No en vano, según la Organización de Naciones Unidas (ONU) se trata del primer país de Europa y el tercero del mundo en consumo de esta actividad sexual ejercida, muy mayoritariamente, por mujeres. De ellas, apenas un 2% lo hace libremente mientras que el 98% restante es obligado a prostituirse por parte de las mafias que se lucran económicamente de sus cuerpos.
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Hoy se celebra en todo el mundo el Día Internacional contra la Explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Niños, una efeméride instaurada en 1999 que pretende concienciar a la ciudadanía sobre una lacra considerada como la esclavitud del siglo XXI. Una problemática que preocupa y ocupa a gobiernos de todo el mundo que, divididos entre abolicionistas o reguladores, tratan de encontrar medidas que permitan, sí o sí, acabar con la explotación sexual.
Mientras se logra, la única oportunidad que tienen las víctimas de trata que intentan salvarse de las redes que las mantienen 'presas' pasa por acudir en busca de ayuda a distintos organismos. En Almería, uno de los territorios españoles más afectados por la prostitución, agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado mantienen constantes operaciones para liberar a mujeres obligadas a prestar servicios sexuales. Aún así, según estiman, apenas logran llegar a un tercio de ellas.
Imposible de cifrar
Acerca de cifras concretas nadie habla. Es imposible determinar cuántas mujeres ejercen la prostitución en la provincia de Almería aunque, en base a los testimonios recopilados por agentes del Orden y oenegés, sí que se tiene claro que se trata de mujeres de origen extranjero y, en la mayoría de casos, se encuentran en España de manera irregular. Algo que permite a sus explotadores ejercer un mayor control sobre ellas. Las principales víctimas, indicaron ayer desde el Instituto Andaluz de la Mujer(IAM), son féminas de entre 18 y 25 años provenientes de países como Rumanía, Nigeria, China y Bulgaria.
Almería forma parte junto a Jaén y Málaga de un programa piloto del IAM para la detección y rescate de mujeres y niñas víctimas de trata con fines de explotación sexual. Durante el primer semestre de este año, se atendió a 1.211 féminas, posibles víctimas de redes de proxenetismo. De ellas, 476 fueron asistidas en la provincia almeriense, donde más atenciones se prestaron de los tres territorios andaluces en los que se desarrolla la experiencia dada la alta actividad que concentran.
«Es necesario concienciar a la ciudadanía de que la explotación sexual de mujeres y niñas las convierte en una mercancía, manteniéndolas en una situación de esclavitud en pleno siglo XXI», pronunció en el marco del día internacional contra esta lacra la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López.
Un tipo de violencia de género
Recordó, asimismo, la consejera que se trata de «un tipo de violencia de género que vulnera, entre otros, el derecho a la vida, a la libertad, a tener una infancia y adolescencia libres, a la seguridad, a la libertad e indemnidad sexual y a la integridad física». Ante ello, pidió «tolerancia cero».
El servicio del IAM cuenta con un presupuesto de 8 millones de euros y está formado por 19 profesionales, con unidades móviles, así como por un teléfono de emergencia y sedes físicas en las tres provincias. Hasta los miembros del equipo, en las tres provincias, acudieron las mencionadas 1.211 féminas, con una media de edad de 20 a 35 años y procedentes principalmente de América Latina (Colombia y República Dominicana), Europa del Este (Rumanía) y norte de África (Nigeria).
Las funciones de este servicio son la detección y contacto con mujeres y niñas que se encuentren en una posible situación de explotación sexual, la información integral y el acompañamiento a las mujeres y niñas víctimas de este delito para posibilitar su seguimiento, así como la atención de situaciones de emergencia, garantizando la inmediatez en la respuesta a las demandas de las víctimas o por derivación de otros recursos, indicaron desde el organismo público andaluz que trabaja por y para las mujeres más vulnerables de la comunidad autónoma.
Además, se incluye la derivación a recursos asistenciales especializados que permita iniciar con el acogimiento un proceso de recuperación, protección y atención integral de las mujeres y niñas y la sensibilización a colectivos profesionales y ciudadanía sobre la situación de la trata en Andalucía.
Este nuevo proyecto del IAM es uno de los recursos a los que las víctimas de trata con fines sexuales pueden acudir en la provincia de Almería. Sin embargo, existen organizaciones y colectivos que acumulan décadas de experiencia con estas mujeres en territorio almeriense y que, a diario, tratan de lograr su reinserción social y laboral.
A este fin específicamente se dedican en la provincia de Almería oenegés como Apramp u órdenes religiosas como Adoratrices y Oblatas. Colectivos a los que se suman otras entidades como Cruz Roja o Mujeres en Conflicto que tienen en común el doble objetivo de sacar a estas mujeres de 'la calle', como comúnmente se dice, así como concienciar a la población sobre la gravedad de la situación que viven y que el consumo de prostitución contribuye a su esclavitud.
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