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Un pasajero entra a la terminal del Aeropuerto de Almería. R. I.
Crisis del coronavirus en Almería | Segunda semana de confinamiento | Ábalos cierra el Aeropuerto de Almería para vuelos de pasajeros y lo deja solo para emergencias

Ábalos cierra el Aeropuerto de Almería y lo deja solo para emergencias

La pérdida del 85% de los pasajeros en la red de AENA obliga al Ministerio de Movilidad a reducir la actividad en la red, lo que lleva al cierre de decenas de aeropuertos del país e, incluso, a la clausura parcial de Bajaras y El Prat

Miguel Cárceles

Almería

Martes, 24 de marzo 2020, 11:02

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El Aeropuerto de Almería ha cerrado la terminal de pasajeros. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que dirige el socialista José Luis Ábalos, ha reorganizado el servicio aeroportuario en todo el país después de que las restricciones impuestas a la libre circulación de personas por el territorio nacional hayan hundido el 85% del pasaje aéreo. Y entre las medidas tomadas está el cierre al servicio ciudadano -esto es, para pasajeros- de decenas de terminales en aeropuertos pequeños y medianos de todo el país, entre ellos el de Almería.

No en vano, la terminal está desde hoy cerrada salvo pequeños accesos para los trabajadores aeroportuarios y para la farmacia que hay en su interior, pero sin más servicios. Mientras tanto, en su pista de aterrizaje no tomará tierra ningún avión más en tanto en cuanto la situación siga siendo de excepcionalidad y las compañías aéreas no dispongan de vuelos operativos. Eso sí, los servicios de navegación aérea y de aterrizaje seguirán abiertos para vuelos sanitarios o de emergencia, y si las aerolíneas decidiesen retomar la operativa se volvería a abrir el edificio terminal.

La situación de Almería no es aislada. El Aeropuerto de Melilla o el Helipuerto de Ceuta llevan así desde hace nueve días y son una veintena de aeropuertos de AENA los que experimentarán la misma situación. De hecho, el cierre de espacios terminales también afecta a los dos megaaeropuertos de Madrid y Barcelona. En el segundo de los casos, sólo estará operativa -y parcialmente- la terminal 1. En el primero, en Barajas, se cerrarán las terminales 1, 2 y 3 y se concentrará toda la actividad en la terminal 4.

Mientras esta situación persiste, AENA ha decidido no cobrar los cánones a las empresas que cuentan con oficinas o concesiones de bares, restaurantes, o espacios comerciales en los aeropuertos del país. En El Alquián había abiertas dos cafeterías y media decena de agencias de alquiler de vehículos además de un bazar de productos alimenticios, tabaco y perfumes entre otros servicios. El que sí que sigue abierto es el de la farmacia que hay en su interior.

La decisión se toma justamente el día después de que El Alquián viviera una situación absolutamente inédita: Por primera vez en décadas ni un solo avión de pasajeros tomó ayer tierra en pista de aterrizaje de El Alquián. Y tampoco despegó ninguno. La crisis sanitaria del coronavirus COVID-19 y las durísimas restricciones impuestas a la movilidad de la población por el Real Decreto del estado de alarma logró lo que no había conseguido en décadas ninguna otra crisis nacional o global: que el aeropuerto se convirtiese en una naturaleza muerta.

Entre los vuelos cancelados estaban incluso los de obligación de servicio público: las rutas con Sevilla -que gestiona de forma indirecta la Junta de Andalucía- y con Melilla dejaron de operar hace días. La empresa Air Nostrum, adjudicataria de la ruta intraautonómica, comunicó el pasado día 15 de marzo al Gobierno de España que cancelaba los vuelos de la línea entre Almería y Sevilla, en aplicación del estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19.

Algo parecido ocurre en el caso de las rutas con Melilla. El Gobierno central prohibió el aterrizaje de vuelos de pasajeros en la ciudad norteafricana, aislada desde que se decretó el estado de alarma para la movilidad ciudadana regular -se mantienen operativas rutas de mercanías u operaciones de emergencias-.

Los únicos datos de pasaje cerrados son los que corresponden a la primera semana de marzo, cuando la crisis sanitaria comenzaba a mostrar su virulencia en el territorio peninsular. En esas fechas el Aeropuerto de Almería arrojó un descenso del 13,8% en número de pasajeros y del 12,2% en aeronaves.

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