El vuelo con Sevilla cae cerca del 30% en pasaje tras más de medio año sin subvención

No obstante, y pese al crecimiento generalizado en el número de pasajeros que utilizaron el Aeropuerto de El Alquián para iniciar o terminar su viaje (un 5,6%, según las cifras del gestor aeroportuario Aena), la cosa va por barrios. Mientras que los vuelos mayoritariamente turísticos, los que tienen origen o destino en el extranjero, crecen de forma sostenida y se asientan entre los diez primeros destinos en conexión con Almería, los vuelos nacionales han sido los que han revolucionado las macrocifras de pasajeros.

Por ejemplo, la conexión aérea con Madrid que actualmente sólo ofrece una compañía, Air Nostrum ha conseguido remontar su pasaje después de caer a la mitad en solo tres años. La cifra récord de 2010, con 275.175 pasajeros (con dos compañías operando la ruta) se desplomó a la exigua de 132.594 en 2013. Al cierre de 2014, la cifra alcanzó hasta los 157.907 usuarios, un 20% más.

Este ascenso también se produce en la segunda línea doméstica con más pasaje, la de Barcelona. La ruta, que en los mejores tiempos llegara a contar con varias frecuencias diarias, consiguió en 2014 volver a acercarse a los 100.000 usuarios. Según las cifras de Aena, la operativa que ahora mismo solo ofrece Vueling (con varias frecuencias por semana) consiguió 94.943 viajeros, un 25,6% más que el año anterior.

Sin embargo, las cifras que experimentan estas rutas, las que viajan hacia los dos principales hub de conexión de vuelos de todo el país, contrastan con las arrojadas el pasado año por el vuelo de servicio público intraautonómico, el único de toda la península, que enlaza El Alquián con el aeropuerto hispalense de San Pablo. Las cifras del pasado año en dicha conexión padecieron un hundimiento del 27%, con 8.608 pasajeros respecto a las del año anterior. Concretamente, según las cifras del ente público que gestiona los aeropuertos españoles, 2014 cerró con 23.229 pasajeros frente a los 31.837 que hubo en 2013 o los 34.479 del año inmediatamente anterior.

El año pasado fue un año atípico en esta ruta, que se opera como obligación de servicio público tras la aprobación del Ministerio de Fomento y de la Unión Europea. Un desencuentro entre la Junta de Andalucía que rebajó las frecuencias para adaptarlas al presupuesto y a la demanda y el Gobierno de España que publicó el último día del año la orden ministerial accediendo a los cambios provocó que durante más de seis meses, entre mediados de enero y el primer día de agosto, dicha operativa no contara con subvenciones públicas, a las que da derecho la operación por concurso. No obstante, cabe recordar, la compañía Air Europa se hizo cargo de la ruta con las condiciones impuestas por el servicio público. Sin embargo los costes por billete crecieron pasando de los 47,52 euros de media de Air Nostrum a los 65,73 euros de Air Europa, unos 18,21 euros más. Cabe recordar que la renovación de la concesión implica cuatro años más de servicio público aéreo entre ambas ciudades andaluzas.