Las sensaciones en 'La cama'

Las experiencias que cada uno de ustedes han podido tener o vivir en sus aposentos, se quedarán pequeñas una vez que decidan adentrarse en 'La cama', un espectáculo en el que las sensaciones están a flor de piel y donde el público se sumerge en la verdadera historia que Teatro en el Aire trata trasmitir.

Dolor, inquietud, miedo, tranquilidad o serenidad son tan sólo algunas de las sensaciones que experimentan los que se adentran en el habitáculo que se ha diseñado para la ocasión. Momentos que todos hemos vivido como escondernos bajo las sábanas cuando creemos que alguien desconocido ha conseguido entrar en la habitación, la desesperación de padecer insomnio o el dolor y posterior satisfacción de parir son algunas revivirán o experimentarán los que decidan disfrutar de este acertado espectáculo que forma parte de la programación del XXXI Festival de Teatro de El Ejido que ofrecerá hoy sus dos últimas sesiones (a las 20 y a las 22 horas).

Teatro en el Aire invita al espectador a hacer un viaje por el pasado y el futuro. Y es que tal y como cuentan los propios actores, «la cama es el epílogo y el prólogo de nuestra vida. Es lo primero que ve una persona que llega al mundo y lo último que ve antes de dormirse para siempre».

La gente que ya ha disfrutado de este espectáculo (ya se han representado cuatro sesiones) han salido fascinados. Se han levantado de 'La cama' con cientos de sensaciones sensoriales. El ambiente les ha envuelto y, tras esconderse la luna, todos han salido para desayunar. Una gran sorpresa les ha llegado a todos tras estar más de una hora viviendo situaciones y participando en todas las situaciones que los actores les han planteado.

Es una obra para vivirla y no para contarla. Soñadores y soñadoras contemplan desde camas, y no sillones, este espectáculo en el que los sentidos están continuamente en alerta y provocan a los espectadores multitud de vivencias.

Teatro en el aire surge de la iniciativa de un colectivo de actores y actrices de nacionalidades diversas (de Chile, Venezuela, Bulgaria, Argentina, Cuba y España), bajo el impulso creador de Lidia Rodríguez. Quien participa en las obras de Teatro en el Aire regresa a sus orígenes: huele, palpa y percibe como si fuera por primera vez. Todo ello sucede gracias a la conjunción de la penumbra, el silencio, la palabra, las texturas, los olores y los sabores.