Edición

Borrar
Media hora de sol por las mañanas, cuando menos calienta, puede ser suficiente para regular el déficit de esta vitamina.
Por qué se habla tanto de la vitamina D

Por qué se habla tanto de la vitamina D

La doctora Carmen Pingarrón destaca los bajos niveles de la 'vitamina del sol' en la población y señala los problemas de su carencia

REDACCIÓN

Jueves, 16 de marzo 2017, 09:54

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Tradicionalmente se han destacado los beneficios de la vitamina D sobre el metabolismo del hueso, de la misma manera que siempre se ha creído que, por el hecho de vivir en un país tan soleado como el nuestro, los niveles de esta sustancia en la población española eran los adecuados.  

Sin embargo, como  alerta la doctora Carmen Pingarrón, especialista en oncología ginecológica que coordina uno de los equipos de ginecología y obstetricia del Hospital Quirónsalud San José, «cuando hemos decidido incorporar la petición de analíticas de niveles de vitamina D a nuestra rutina clínica, nos damos cuenta de que los ciudadanos, en general, presentan una deficiente presencia de la misma.  Y aquí nos han surgido varías preguntas: ¿por qué sucede esto?, ¿qué está pasando?, ¿por qué tenemos carencia si disfrutamos de tanto sol?». 

Es cierto que la vitamina D se obtiene en parte por la alimentación, pero en su mayoría se activa en la piel gracias a la acción de los rayos UVB. Según señala esta especialista, entre los diversos factores que influyen en esos bajos niveles está el hecho de que en los últimos años las campañas de prevención de cáncer de piel han sido muy eficaces: «La población ya se aplica protección solar, la cual impide la absorción de la vitamina, y esto explica, en parte, esas cifras deficitarias en la ciudadanía». 

La doctora Pingarrón llama la atención, asimismo, sobre los muchos beneficios extraóseos de la vitamina D. «Se han hecho diversos estudios sobre sus ventajas para los pacientes diabéticos, en quienes disminuye la resistencia a la insulina, de igual manera que en los hipercolesterolémicos contribuye a mejorar su perfil lipídico». De igual manera, continúa esta experta, la vitamina D favorece la coordinación muscular en ancianos, con la consiguiente disminución de la tasa de caídas.

«También es muy importante su papel en la adolescencia, ya que es una etapa en la que resulta muy frecuente que se asocien las carencias en hierro por el inicio de las menstruaciones con las hipovitaminosis. Incluso se habla de su papel en procesos inmunológicos y oncológicos, donde queda abierto un amplio campo de estudio y desarrollo», abunda la doctora Pingarrón, para quien, moda o ciencia, es evidente la importancia de que se mantenga el control de los niveles de vitamina D y una suplementación adecuada, siempre bajo prescripción médica.

¿Qué hacemos pues, si tomar el sol es tan malo? Todo en su justa medida. Con media hora de sol en brazos y piernas a horas tempranas de la mañana tendremos la dosis necesario, a la que hay que sumar la que obtengamos de alimentos como el salmón rojo, la caballa, los arenques y las sardinas en aceite, el atún en conserva, los huevos... amén de los alimentos fortificados con esta vitamina, como algunos lácteos y cereales, por ejemplo. También existen suplemento en la farmacia, que serán recetados de ser necesario por su médico.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios