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Lunes, 18 de junio 2018, 08:41
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Sentencia insólita la que ha tenido lugar en Lisboa. Una mujer ha sido condenada a pagar 7.500 euros a sus vecinos por el «ruido ilícito» que hacía con los tacones a primera hora de la mañana. Los hechos se remontan a 2014 y los protagonistas de esta denuncia son Mario y María, que vieron cómo su vecina les despertaba con sus taconazos a las 6.00 o 7.00 de la mañana..
El marido comprobó que Natividad, como se llama la condenada, salía de casa con zapatos de suela de goma. Es decir, que se ponía los tacones adrede para molestar. Al irse de casa, el perro de la mujer empezaba a ladrar sin parar.
Una vez presentada la denuncia, la acusada se defendió argumentando que Mario y María estaban obsesionados con ella, que tenían manía persecutoria contra ella.
Ya ante el juez, éste, en primera instancia, emitió una sentencia contra el matrimonio, obligándoles a pagar 6.250 euros. El matrimonio recurrió al Tribunal de Apelación de Lisboa que ahora ha anulado el dictamen anterior y ha reconocido que los vecinos de abajo tienen razón en sus quejas. Mucho han tenido que ver los testimonios de los vecinos, que llegaron a declarar que la mujer andaba de manera «ruidosa» y que parecía «una cabra».
«Los ruidos innecesarios, que causan perjuicio, son siempre ilícitos, lo que se traduce en un uso anormal del edificio y en un abuso de sus derechos», apunta la sentencia.
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