La denuncia de OCU contra Nocilla y Cocar: "el problema está en la leche y los ingredientes"

Según OCU, Idilia Foods utiliza de forma irregular la alegación nutricional "+ leche fuente de calcio" en el envase de Nocilla, ya que no indica en qué medida la crema de untar tiene más leche (si es un 1 % o un 50 %), y tampoco señala con qué producto de la misma categoría se está comparando para hacer dicha afirmación.

Además, la organización denuncia que la ubicación y el tamaño de las letras y del signo "+", tal y como se presentan en el envase, pueden inducir a error al consumidor, ya que aparentemente abarca tanto a la leche como al calcio.

Si se tienen en cuenta los perfiles nutricionales (aún pendientes de aprobar por la Comisión Europea), la afirmación sobre el calcio no debería estar incluida en la etiqueta, ya que el producto multiplica por cinco el límite de grasas saturadas y por seis el límite de azúcar establecidos, señala OCU.

En el caso de Cocar, la organización cree que la empresa incumple el Reglamento europeo por la falta de menciones obligatorias en el envase como la denominación del alimento y la cantidad de cada uno de los ingredientes que lo configuran.

Así, la normativa establece que la denominación debe indicarse en la etiqueta de forma clara, legible y si se comercializa en España, debe estar en español.

Sin embargo, en este producto se desconoce si se trata de un zumo o de una bebida refrescante, ya que todas las denominaciones que constan en el envase son comerciales ("Cocar", "Superjuice", "Organic energy", etc).

Además, en la lista de ingredientes del envase no aparece la cantidad de guaraná, green tea o yerba mate que se destacan en el frontal del mismo, un requisito obligatorio.

Según OCU, "el engaño puede orientar la compra hacia esos productos en detrimento de otros de similares características, pero que sí informan de su verdaderas características y formas de producción".

En el primer caso de Nocilla la denuncia ha sido presentada ante la Dirección de Consumo de la Generalitat Valenciana, ya que la empresa tiene su sede social en Valencia; mientras que la denuncia contra el fabricante de Cocar se ha registrado ante el mismo organismo de la Junta de Andalucía al estar ubicada la compañía en Sevilla.

En ellas, OCU solicita a ambas direcciones generales que pongan en marcha un procedimiento de inspección y sanción a las dos empresas.

Además, OCU junto con otras organizaciones de consumidores de 11 países, ha puesto en marcha una campaña para exigir a la Comisión Europea que publique los perfiles nutricionales y acabe con las alegaciones en alimentos que no tienen un perfil nutricional saludable.