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Empeñar el coche, una forma atrevida de ganar dinero

Empeñar el coche, una forma atrevida de ganar dinero

En los últimos años cada vez más personas recurren al empeño de vehículos, una forma de obtener dinero rápido pero que entraña algunos peligros

Diego Quero

Lunes, 1 de septiembre 2014, 03:29

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A medida que la mayor parte de los ciudadanos se han visto asfixiados por la crisis económica, han ido apareciendo empresas que gestionan necesidades para consumidores en apuros. Por no poder seguir con el ritmo de vida que existía hasta el año 2007, son muchos los que se han visto obligados a vender casas, coches y demás posesiones. De forma paralela, las casas de empeños parecen reproducirse para absorber todo el oro que exista y cualquier utensilio de segunda mano. Todo, con el fin de conseguir más dinero para salir del apuro económico. En medio de esa espiral, también existen las empresas que se dedican a comprar tu vehículo para que luego lo vuelvas a comprar.

Estas empresas se anuncian sobre todo en las ciudades, con carteles llamativos y con eslóganes tremendamente atractivos. La última estrategia fue un anuncio que prometía hasta 20.000 euros por tu coche sin dejar de disfrutar de él. Una de las curiosidades del spot es que el protagonista es calvo, pero después se podía ver cómo lucía una larga melena al viento. Entonces piensas que algo no cuadra, porque es raro que alguien te dé una gran suma de dinero y tú sigas disfrutando de tu coche, además de lo del pelo claro.

¿Entonces, dónde está el truco? Al parecer, no hay truco, pero si unas condiciones que hay que estudiar. La operación de empeño es fácil, como fácil es encontrar a una empresa que quiera comprar tu coche. Lo primero que harán es tasar el vehículo, que por supuesto tiene que estar en buenas condiciones. En la tasación no suele haber engaños, ya que todas estas empresas deben de regirse por un baremo que publica Ganvam, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios. Con el coche tasado, la empresa decidirá dar al cliente un porcentaje del valor del vehículo, que en ningún caso llega al 100 por 100 del precio estimado. Aunque muchos prometen dar hasta un 75 por ciento del valor del vehículo, la mayoría no suelen pasar del 50 por ciento. Una cifra que se puede considerar muy baja si el coche tasado cuenta con algunos años de más.

Así, la empresa que ya tiene el coche también dará un crédito al mismo tiempo que estipula un tiempo para que le devolvamos ese dinero. Ese préstamo acarrea unos intereses que son excesivos en la mayor parte de los casos, por lo que al querer recuperar el coche habrá que pagar mucho más dinero del que hemos obtenido en un primer momento. Y claro, si no se puede pagar esa cantidad, habrá que decir adiós al coche.

Hay empresas que tienen otro método, ya que proporcionan el crédito y el cliente tiene que pagar un alquiler mensual. Aseguran que es un producto financiero sin intereses, aunque el alquiler mensual puede ser más costoso en algunos casos que un porcentaje del dinero que haya que devolver.

Tanto unas fórmulas como otras no son recomendables por las asociaciones de consumidores, que ven en estas prácticas como una de las últimas soluciones que debe elegir un ciudadano para financiarse.

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