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Martes, 30 de junio 2015, 11:46
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Se llaman Glenn y Buzz y son un Jack Russell de 9 años y un Staffordshire Bull Terrier de 10, respectivamente. Su vida podría haber pasado desapercibida sino llega a ser por la entrañable historia que han protagonizado. Estos dos perros abandonados, que se conocieron en las calles de Hartlepool, al norte de Inglaterra, son inseparables. Y se complementan: Glenn es completamente ciego pero Buzz le sirve como ojos, puesto que es un can guía.
A día de hoy ambos se encuentran a salvo en el centro de rescate Stray Aid en Coxhoe, Durham. Hasta la fecha, se ha intentado por todos los medios encontrar un hogar definitivo para ambos, pero lo cierto es que han desestimado esta opción. ¿El motivo? Si se separan caen presas del nerviosismo y la ansiedad.
A día de hoy, la única posibilidad que contemplan en este hogar de acogida es hallar alguna familia que quiera adoptar tanto a Glenn como a Buzz. Añaden en Durham que lo preferible es que sea un hogar más bien tranquilo y preferiblemente con mayores jubilados que acompañen a los dos inseparables amigos.
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