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¿Es este el fin de las monedas de 1 y 2 céntimos? ¿Qué hacemos con ellas?

¿Es este el fin de las monedas de 1 y 2 céntimos? ¿Qué hacemos con ellas?

Varios países de la Unión Europea se suman a la idea de dejar de utilizarlas, debido a lo que cuesta fabricarlas y al poco valor que tienen

ideal.es

Miércoles, 21 de octubre 2015, 10:54

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Irlanda ha sido el último país de la Unión Europea en sumarse a la propuesta de dejar de utilizar las monedas de 1 y 2 céntimos, bajo el pretexto del precio que cuesta fabricarlas en relación con el valor que realmente tienen. Y es que para muchos ciudadanos encuestados al respecto, estas monedas ocupan un espacio y provocan un peso que, dado su poco uso y su acumulación, resulta molesto.

De esta forma, parece que los días están contados para las monedas de 1 y 2 céntimos, pero ahí no terminan las aspiraciones del Banco Central Europeo y la Unión Europea. El objetivo es hacer desaparecer, en su mayor parte y en la medida de lo posible, el dinero efectivo.

Las razones argumentadas para esta propuesta son combatir el fraude fiscal y el movimiento dinero negro, aunque los detractores de la medida aseguran que ponerla en práctica perjudicaría a los más pobres.

No obstante, parece que esta medida de limitar el efectivo está ya programada para algunos países de la Unión Europea. Un ejemplo de ello es Dinamarca, que a partir de 2016 tiene previsto no aceptar monedas en gasolineras, tiendas de ropa y restaurantes.

Además, algunos países como España y Francia ya han limitado el pago en efectivo, al tiempo que Italia ha reducido dicho límite a los 3.000 euros, fomentando el pago con tarjeta.

¿Qué hacemos con las monedas de 1 y 2 céntimos?

Ante esta noticia, son muchos los ciudadanos que se preguntan qué hacer con esta 'calderilla' que muy pronto podría perder el poco valor que tiene.

El tema es complejo, ya que son muchos los establecimientos que han decidido dejar de aceptar este tipo de efectivo, por lo que su gasto plantea un problema.

Evidentemente, de retirar este dinero del mercado, el BCE plantearía, probablemente, un sistema de devolución del efectivo en monedas superiores a aquellos que se prestaran a entregar sus monedas de 1 y 2 céntimos en los bancos o cajas de ahorros.

Por el momento, lo más sensato es ir acumulando estas monedas hasta obtener una cantidad considerable y llevarlas al banco a canjearlas por monedas de mayor valor e, incluso, billetes.

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