Edición

Borrar
Madres Agustinas contemplan el paso del Cristo de la Expiración, un par de años antes del cierre del convento.
Ponen el convento de Santa Úrsula en venta y la Diócesis no lo comprará

Ponen el convento de Santa Úrsula en venta y la Diócesis no lo comprará

Una abogada madrileña está gestionando la operación de venta de espacio, cerrado desde 2008 y propiedad de las Madres Agustinas Recoletas

Lorena Cádiz

Viernes, 2 de junio 2017, 01:08

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Al ritmo del 'Hallelujah' de Leonard Cohen, un vídeo de dos minutos y medio recorre con detalle buena parte de las estancias del convento de Santa Úrsula. El claustro, la cocina, el patio, las habitaciones... Ese vídeo lo subió hace unos días, a su canal de Youtube, la abogada madrileña María Concepción Rayón Ballesteros, con un mensaje conciso y claro: «Convento de Santa Úrsula en Jaén. Se vende por falta de vocaciones. Los interesados pueden contactar con la abogada de Madrid María Concepción Rayón Ballesteros, que se encarga directamente de gestionar la venta en nombre de la Congregación que se ve obligada a vender».

No habla de precio ni de qué tipo de ofertas están dispuestas a escuchar las Madres Agustinas Recoletas, cuya congregación es la propietaria de este convento, que cerró en el año 2008, como dice el anuncio, por falta de vocaciones. Ya eran muy pocas las madres que vivían en Santa Úrsula y fueron trasladadas a otros conventos, dejando el de Jaén vacío y así lleva ya nueve años.

Lo único que está claro a este momento es que la Diócesis de Jaén no está en la lista de compradores. Así lo confirman desde el Obispado, que aseguran que conocen que el convento está en venta, pero que en ningún momento han mantenido conversaciones con las Madres Agustinas al respecto. Ni la congregación le ha ofrecido a la Diócesis la posibilidad de comprar el convento, ni ésta se ha mostrado interesada. Dicho esto, se abre la puerta a que, o bien la Administración pública o bien la iniciativa privada puedan hacerse con este espacio y reconvetirlo, por ejemplo, en un hotel.

Segregación de la capilla

Desde el Obispado aclaran que sólo una pequeña parte del convento ha pasado a ser propiedad de la Diócesis de Jaén. Se trata de la capilla, que estaba anexa a la iglesia de la Magdalena, y sobre la que se hizo una segregación legal, y se donó a dicha iglesia. Antes que eso, también donaron a la parroquia de La Magdalena, la imagen de Santa Rita, obra de Jacinto Higueras, y que sigue siendo una imagen muy venerada, tanto en el barrio como, en general, en la ciudad. El convento de Santa Úrsula fue prisión durante la Guerra Civil, y luego hasta el año 1943, que fue entregado el edificio a las monjas, que habían huido cuando comenzó la guerra.

Según explica el sacerdote Tomás de la Torre Lendínez, en aquel entonces el estado físico del monasterio era desolador. Las monjas para mantenerse pusieron un colegio de niñas. Más tarde retornaron a la clausura de la orden contemplativa de San Agustín, y con inmensos esfuerzos pudieron reconstruir poco a poco aquel inmenso caserón: la confección y venta de las antiquísimas yemas de Santa Úrsula no era un medio de vida suficiente, por lo que en aquellos años todas las hermanas lavaban a mano, en grandes pilones, la ropa de los alumnos internos de un colegio de la ciudad. Más tarde, se dedicaron a plantar champiñones en un unos largos sótanos que existen debajo del edificio y todo lo acompañaban con bordar, zurcir y hacer filigranas en la tela.

Ya en la década de los setenta montaron un negocio de superlimpieza de ropa abierta al público de Jaén, con el nombre de 'Santa Rita'. Según cuenta De la Torre Lendínez, gracias a este trabajo, la comunidad acometió reformas en el interior del edificio, creando un hermoso claustro, adecentando las celdas monjiles, renovando la hospedería, embelleciendo la iglesia conventual, que tras su restauración se abrió al culto en el año 1983.

Tras su cierre en 2008 han sido varias las ideas que se han lanzado sobre el uso que podría darse a este espacio, declarado Bien de Interés Cultural (BIC). En su día, OCO planteó que se trasladara allí la Escuela Oficial de Idiomas, mientras que la asociación cultural Iuventa ya propuso al Ayuntamiento que se llegara a algún tipo de acuerdo para convertirlo en un «hotel con encanto».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios