Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Laura Velasco
Sábado, 13 de agosto 2016, 00:17
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
A sus 21 años, Juan Molina asegura que ya ha conseguido superar su adicción al juego. No fue fácil, pero por suerte logró darse cuenta a tiempo. «Empecé a jugar con 17 años, entrando a salones de juego. Me colaba o me dejaban entrar, porque como me dejaba dinero acababa entrando», relata este jienense, cuya adicción era más a los «lugares físicos» que al juego online, más concretamente, a la ruleta.
Juan Molina recuerda que se dio cuenta de que padecía una adicción cuando comenzó a cometer delitos. «Empecé a realizar hurtos y hacer cosas que no estaban bien para conseguir dinero y poder seguir jugando y también para pagar mis deudas», apunta.
Su adicción duró poco tiempo, «unos cuatro o cinco meses», pero lo suficiente como para gastar hasta 5.000 euros en el juego. Fue entonces cuando decidió acudir a la asociación en busca de ayuda. «El trato con mi familia cambió, también mi actitud y mi manera de ser. Trataba mal a mis padres, sólo pensaba en el juego y en cómo conseguir dinero, el tema económico era un problema de verdad. Simplemente no era yo», afirma el jienense.
Decidió acudir a Alujer, donde recibió ayuda. Su tratamiento duró año y medio, pasando por los tres niveles de ayuda psicológica. «La terapia dura más porque hay gente que tiene recaídas. Consiste en charlas de terapias en grupo para contar cómo te sientes y que te ayuden los monitores para que veas que eso lo puedes cambiar, que sí hay salida», manifiesta. Resalta además que en Alujer les enseñan a «cómo gestionar el dinero», ya que antes «si llevaba 20 euros los gastaba», pero ahora sabe administrar su economía.
Ahora, Juan es uno de esos monitores y trata de ayudar a los que como él comenzaron una peligrosa relación con los juegos de azar. «Colaboro trasmitiendo a pacientes lo que he vivido y lo que he conseguido. Les cuento mi historia para que vean que el juego de azar es un peligro» asegura. Y es que, según el joven hay solución a la adicción al juego. «Para mí ha sido volver a nacer, veía mi vida muy mal», concluye.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.