Edición

Borrar
Higinio Vilches posa con la camiseta del Atlético de Madrid del centenario que le regaló Jesús Gil con su nombre, la del debut con el Español y con la que ganaron 1-3 en la penúltima jornada de liga al Barça arrebatándoles la liga.
Jaén y fútbol por los poros

Jaén y fútbol por los poros

Higinio Vilches Pescador, exfubolista y próximo presidente del Real Jaén

Miguel Ángel Contreras

Miércoles, 6 de julio 2016, 00:28

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Imaginen que debutan en Primera División. Imaginen que lo hacen en el Santiago Bernabéu, la grada abarrotada, mitos del fútbol de blanco enfrente y que les llega un balón y, como han soñado mil veces desde niños, marcan. En la portería contraria. Sí, sí, como lo leen, estreno en la mejor liga con un gol suyo en el templo del Real Madrid. Pues él no tiene que imaginar, solo recordar. Higinio Vilches Pescador (Jaén, 1953) es de los pocos que puede presumir de tal hazaña, siendo además de los escasísimos jienenses que ha alcanzado la élite en el deporte rey, el sueño de la mayoría de chavales, al menos antes de los youtubers.

Imaginen ahora que son del Real Jaén. Mucho. Tanto que serán su próximo presidente. Imaginen que su hijo, que lleva su nombre, sigue sus pasos y también es futbolista. Pero no del Real Jaén. Del Linares. Pues él tampoco tiene que imaginarlo, solo llevarlo con un «la familia es lo primero y los futbolistas hoy en día son profesionales en toda la extensión de la palabra». Poco más que añadir, qué es la vida sino contradicciones.

Es también del Atleti de Madrid, cuarenta años a. C. (antes del Cholo). Entonces llegó a su cantera en tiempos no tan bellos como los actuales, pero casi, en los que lo del pupas no se aceptaba. Luis Aragonés lo cogió un día y, después de que el resto de los presentes dieran vueltas a la forma de decirle que no iban a contar con él, le espetó de forma brusca: «Te voy a decir la verdad, no tienes nivel para jugar en este equipo». «Me dolió y me fui con lágrimas, pero me vino bien y desde entonces siempre actúo así, directo y de frente. Luego acabé siendo amigo de Aragonés y teniendo una gran relación. Un tío listísimo», comenta Higinio ahora sobre el Sabio.

Hijo de familia numerosa (cinco hermanas y dos hermanos) su padre Higinio fue diputado por Jaén por UCD, uno de los que aprobó el proceso constituyente, de los 'padres' de la Constitución. Fue también presidente de la Federación Jienense de Baloncesto y futbolista, llegando a jugar en el Real Valladolid en Segunda A. El balón corría por sus venas.

Higinio II llegó más lejos. Cedido por el Atlético al Málaga, con éste debutó en Primera a los 21 años. «Fue el gol del empate, perdimos 4-1 pero no todos pueden decir que debutaron marcando», rememora. Después volvió al Atlético dos años y de ahí al Nástic de Tarragona, donde siendo uno de los líderes llamó la atención del Español de Barcelona ya en 1980. Compartió césped con Cruyff, Maradona o Schuster. «Cruyff es el mejor futbolista con el que he jugado y el más inteligente», ha reconocido.

Sus hermanas guardan camisetas de todos ellos. «Se las regalaba a mi madre», explica. Entre sus grandes recuerdos, un 1-3 en el Nou Camp con el Español que le quitó la liga a los azulgrana, el 'Tamudazo' de la época.

Las lesiones se interpusieron en su camino y acabó firmando por el Cádiz dos años en Primera y Segunda y en el Real Jaén ostentando la capitanía hasta su retirada a finales de los ochenta. Acabó con más de un centenar de partidos en la máxima categoría y también en el equipo blanco.

'Pelea' con Del Bosque

Su vida, incluso la pública, no acabó cuando colgó las botas. Siguió estando en el foco. Licenciado en INEF (Madrid) ha sido entrenador del Real Jaén B, de las categorías inferiores, de la Olímpica Jienense o del Martos.

Siendo director de la Escuela Municipal de Deportes 'descubrió' junto a Ismael Almazán al último jienense que ha logrado enfundarse la camiseta de la Selección absoluta, Manu del Moral. «Llegó con la equipación completa del Barcelona y apenas lo vi jugar pregunté: ¿Quién es ese chaval?», rememora. «Estaba por encima del resto en todo». También quiso 'llevarse' a Alberto Cobo al Atleti, pero Del Bosque lo fichó para la cantera del Madrid. «Me dijo que como él tenían 60 viéndolo en un partido de fútbol base. El lunes siguiente cuando llamé a su familia ya estaban en Madrid firmando», recuerda.

«Es más listo que los perrillos chicos», dicen de él algunos que lo conocen bien. Ha sido profesor del Instituto en Las Fuentezuelas, de ciclos de formación superior o concejal de Deportes, el que calificó, «y me he enfrentado a muchos», como «el reto más complicado que he tenido».

Ahora se enfrenta a otro mastodóntico: la presidencia del Real Jaén. «Un honor», en malos tiempos para la lírica. Aunque él conoce el fútbol y la casa (y el Ayuntamiento, su valedor) y su 'mala malísima salud de hierro', que decía el recordado Fernando Arévalo, siempre al filo del precipicio, nunca cayendo. «En el corto plazo está dificilísimo, en el largo hay soluciones», apunta.

Imaginen que colabora en su salvación y en unos años, para el centenario, aunque el fútbol dista de ser dos más dos, cumple el sueño del alcalde de alcanzar la Primera. Imaginen. Él intentará que sean recuerdos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios