Edición

Borrar
Protesta contra la violencia de género, el pasado martes, ante la Delegación del Gobierno.
Más de 1.200 mujeres sufren algún tipo de riesgo en la provincia

Más de 1.200 mujeres sufren algún tipo de riesgo en la provincia

Este mes de agosto se han incorporado 42 mujeres a la lista de víctimas de violencia de género que requieren algún tipo de asistencia policial

Lorena Cádiz

Lunes, 31 de agosto 2015, 02:05

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Este podría considerarse un verano negro. Siempre por estas fechas es frecuente un repunte en los casos de violencia de género, pero este verano se han sucedido las víctimas mortales, a lo largo y ancho del país. Aunque en la provincia de Jaén, el de este jueves en Noalejo, ha sido el primer caso de la época estival en el que fallece una mujer a manos de su pareja o expareja, son muchos los «casos activos». Se denomina así a las mujeres que han denunciado violencia de género y sobre las que existe algún tipo de protección policial, ya sea mínima o total, por parte de la Policía Nacional o la Guardia Civil, que son los cuerpos encargados de esa protección.

Hasta el 31 de julio existían 1.211 «casos activos» en la provincia, según datos de la Subdelegación del Gobierno. A estos, se han incorporado otros 42 en lo que va del mes de agosto, debido a la denuncia por parte de las víctimas.

Existe un protocolo de valoración del riesgo en el que se encuentra una mujer, que es el que determina el grado de protección que necesita. Ese protocolo, elaborado por la Secretaría de Estado de Seguridad, dependiente del Ministerio del Interior, sufrirá una «profunda renovación» en breve, tal y como anunciaron ayer fuentes del Gobierno.

Aún así, hasta la fecha los niveles son: 0 (riesgo no apreciado); Nivel 1 (bajo; nivel 2 (medio); Nivel 3 (alto) y riesgo extremo. En este último caso de riesgo extremo, según la Subdelegación, no existe ningún caso en la provincia.

En riesgo alto, la cifra de mujeres suele oscilar entre las 2 y las 4, ya el riesgo se revisa constantemente y va variando con frecuencia. El gran grueso de casos se encuentra en el nivel 0, de riesgo no apreciado, donde hay 668 víctimas, mientras que el resto, se reparte entre el nivel medio y el bajo.

Pero, ¿qué implica estar en un nivel u en otro? Según el protocolo, el riesgo no apreciado implica «las mismas medidas policiales que para cualquier otro ciudadano denunciante», es decir, darle información sobre sus derechos y los recursos a su disposición.

En el nivel bajo, se mantienen contactos telefónicos «esporádicos» con la víctima, además de comunicarle al agresor que la mujer está siendo protegida. Junto a esto, la Policía explica a la mujer medidas de autoprotección.

En el nivel medio se dan las medidas anteriores y además, vigilancias periódicas en el domicilio, en el trabajo y en las entradas y salidas a centros escolares. Los agentes la acompañan a las actuaciones de carácter judicial, asistencial o administrativas que necesite, y se trata de adjudicar un móvil a la mujer.

Y en el nivel alto y extremo, se realiza una vigilancia permanente de la víctima «hasta que las circunstancias del agresor dejen de ser una amenaza inminente». Además se solicita a la mujer que se traslade a un centro de acogida o al domicilio de un familiar y se realiza un «control esporádico» de los movimientos del agresor, además de contactar con el entorno de ambos.

Si estos datos se comparan con el año pasado, a fecha del 31 de julio de 2014, la cifra era más alta y alcanzaba los 1.343 casos. De ellos, 778 mujeres se encontraban en riesgo no apreciado.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios