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Técnicos bajan la campana desde el campanario y comprueban el estado en el que se encontraba.
Un 'milagro' en La Puerta de Segura

Un 'milagro' en La Puerta de Segura

La campana de la iglesia, de 500 kilos de peso, se paró en seco, y nadie se explica como no cayó sobre el templo o a la calle, sino que se mantuvo 'pendiendo de un hilo'

Lorena Cádiz

Jueves, 26 de marzo 2015, 00:12

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«Ha sido un milagro». Aunque suene raro, esas palabras no las pronunció el párroco de iglesia de San Mateo, en La Puerta de Segura, sino los campaneros que, el pasado lunes, desmontaron la campana que el sábado por la tarde, mientras anunciaba misa, había parado de voltear en seco. En aquel momento nadie se explicó que había pasado, porque la campana había dejado de sonar. La misa se celebró y el párroco, Juan Mena, llamó a los técnicos para que, en cuanto pudieran, acudieran a ver lo que había ocurrido.

«En cuanto los técnicos subieron a inspeccionarla, dijeron que era necesario bajarla de inmediato porque había peligro de que cayera», explicó el párroco, que asegura que la sorpresa se la llevaron cuando la bajaron y vieron en qué estado estaba. La campana, con un peso de 500 kilos, tenía partidas tres de las cuatro garras que la unen al yugo, y la cuarta tenía una gran fisura, y estaba a punto de romperse.

Lo que nadie se explicaba cuando la vieron en el suelo es por qué el motor se había parado cuando la campana se rompió y dejó de voltear. «El motor no está roto y lo normal hubiera sido que hubiera salido despedida, de manera que podía haber caído en el interior de la iglesia, a la calle o incluso al río», decía este martes el párroco, aliviado porque nada de esto haya ocurrido. «El Señor ha puesto su mano y ha mandado una legión de ángeles para que la sostuviesen y no fuese despedida por los aires», aseguró.

Trasladada a un taller

Tras bajarla del campanario, la campana ha sido trasladada a un taller de Málaga, especialista en la materia, donde revisarán el estado en el que se encuentra «y nos dirán cuáles son las soluciones, aunque parece que habrá que refundirla», explicó el párroco, que fechó en 22 años la antigüedad de la misma.

De momento, en La Puerta de Segura se quedan sin la gran campana de la iglesia, pero no se quedarán sin saber la hora. «La que se ha retirado es la más grande, pero hay otras dos más pequeñas, que son las que, a partir de ahora, y hasta que se arregle la grande, marcarán la hora al pueblo».

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