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Las colas para pedir Justicia Gratuita han obligado a poner un sistema de cita previa.
Del turno de oficio a la jurisprudencia del Tribunal Supremo

Del turno de oficio a la jurisprudencia del Tribunal Supremo

En una semana letrados de la maltratada Justicia Gratuita ganan un caso civil que crea doctrina en toda España y un fallo penal que corrige al TSJA

JUAN ESTEBAN POVEDA

Viernes, 24 de octubre 2014, 01:33

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Hace ya más de cuatro años que la mujer entró al despacho de José María Moreno, abogado colegiado desde 1995 que dirige uno de los despachos más prestigiosos de Linares. Una mujer humilde para un caso aparentemente humilde: un divorcio por los malas con dos hijos de por medio. Uno más. Pero era el suyo. Y quería pelear por los derechos de los pequeños. Ella no tenía dinero para pagarse un abogado, así que echó los papeles para la Justicia Gratuita y le mandaron a un despacho de la Corredera de San Marcos. Hoy su caso está en todos los periódicos de España, y ha sentado jurisprudencia, pues el Tribunal Supremo ha fallado a partir de su pleito que un hombre está obligado a pasar la pensión a sus hijos aunque esté en la cárcel. Si no tiene ingresos, que venda lo que tiene. Lo que no figura en la sentencia es que el letrado que ha batallado durante cuatro años y que ha volcado un fallo de la Audiencia de Jaén percibirá en pago posiblemente menos de lo que cuesta la gasolina de los desplazamientos y el material empleado en el caso, y que no cobrará hasta dentro de más de un año. Así de maltratada está la Justicia Gratuita, por más que juegue con derechos fundamentales en muchos casos.

  • personas solicitaron cada día del último año un abogado gratis al no tener medios para pagarse uno particular.

«A cada caso se le dedica el esfuerzo y el tiempo que requiere, al margen de que sea del turno o no. Siempre se pone todo el empeño del mundo para defender al cliente», asegura el letrado, que se dio de alta en el servicio de Justicia Gratuita hace ya casi veinte años, casi al mismo tiempo que se colegió. «Los asuntos del turno y los otros se mezclan en el día a día y se llevan de la misma forma, sin distinguir unos de otros», indica.

Juan Jesús Garzón, abogado de prestigio que trabaja en un despacho en Jaén, acaba de ganar otro caso en el Supremo. Representaba a los familiares de Purificación Armenteros, asesinada por su ex marido, Fermín J.M., en Torredelcampo. Uno de los crímenes más violentos que se recuerdan en la provincia. La Audiencia de Jaén impuso una pena de 22 años y medio de cárcel. La más dura dictada en Jaén en los últimos tiempos para un solo delito. El TSJA la atenuó en dos años y medio. La familia se encomendó a Garzón, que recurrió al Supremo y logró que de nuevo la pena fuera de 22 años y medio. La familia de Purificación no tenía medios para pagarse un abogado. Desde 2009 hasta que la semanas pasada falló el Supremo, Garzón actuó desde el turno de oficio: una instrucción dura, un jurado, una apelación al TSJA, una casación al Supremo. Muchas horas de trabajo. «No es algo que se haga por dinero sino por sentido de la Justicia», asegura.

El mismo caso tuvo una derivación civil, pues la madre de Purificación, Juana Vacas, aceptó la herencia de su hija sin saber que estaba aceptando al mismo tiempo las deudas del asesino, con la que Purificación estaba en gananciales. Otro abogado de la Justicia Gratuita logró demostrar que los notarios que escrituraron la herencia no habían hecho bien su trabajo y colocaron a Juana Vacas en indefensión.

Recortes

La Justicia Gratuita es sin embargo una institución maltratada. Hay 430 abogados de Jaén inscritos. Aún les deben parte del trabajo hecho en 2013 y prácticamente todo lo de este año. El decano del Colegio de Abogados de Jaén, Vicente Oya Amate, lleva meses asegurando que si se mantienen los recortes no se podrá mantener con los niveles de calidad con los que se prestan actualmente. La advertencia se produce además cuando la demanda del Servicio de Orientación Jurídica bate récords históricos. El año pasado 13.840 personas demandaron un abogado gratis para poder pleitear, con un incremento de más de 2.000 solicitudes respecto al año pasado (un 16%). La media es de 38 solicitudes al día.

«Mucha gente no puede pagarse un abogado. Se ha agravado además con las tasas, porque el derecho a la Justicia Gratuita exime del pago de las tasas», apunta Vicente Oya. Una quinta parte de las solicitudes fueron rechazadas, y finalmente se turnaron 11.094 asuntos. Más de la mitad corresponden a la jurisdicción penal (5.926), mientras que en la civil alcanzaron los 3.600 asuntos. La avalancha de solicitudes coincide además con una reducción del 10% de los fondos que dispone el Colegio Oficial de Abogados.

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