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El Atlético Mancha Real sumó su decimocuarta jornada sin ganar y sepultó muchas de sus opciones de permanecer en Segunda B.
Para el Mancha Real no hay resurrección
ATLÉTICO MANCHA REAL

Para el Mancha Real no hay resurrección

Los verdes cayeron ante El Ejido complicando aun más una salvación, que ya es poco menos que un milagro

PACO ALONSO Y JESÚS MUDARRA

Lunes, 17 de abril 2017, 04:36

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Lleva 14 jornadas el Atlético Mancha Real de sepulcro y ayer tenía una de sus últimas opciones de ponerse en pie y resucitar para buscar la permanencia a la desesperada, pero el 'milagro' no ocurrió y en vez de eso los verdes sumaron una nueva derrota a una lista demasiado extensa. Las imprecisiones arriba y las concesiones en defensa lastraron al conjunto de un Rodolfo Bodipo que ve cómo el objetivo marcado se ha complicado hasta un extremo inesperado.

En cuanto al juego, la primera parte dio la razón a un previsión de muy poco juego, si bien es cierto que el CD El Ejido se animó en la recta final y debió haberse adelantado en el marcador con un gol legal anulado por fuera de juego inexistente. Antes tan solo contabilizó un único tiro a puerta, pero no entre los tres palos. Los visitantes dieron a tramos la posesión a los locales que no supieron muy bien qué hacer con el esférico. Con Sergio Martín desplazado a la banda izquierda, el desborde brilló por su ausencia por ese carril hasta que se incorporó Ocaña desde el lateral.

Pasado el cuarto de hora los de Bodipo ganaron metros. El manejo manchego del cuero tuvo criterio, y por ello disfrutó de dos aproximaciones con tiros de Airam, ambos demasiado cruzados, primero por la derecha y luego por la izquierda. Había imprecisiones en los de celeste, que no se aprovecharon de la 'ventaja' de que el central Josema se cargara con amarilla en el minuto dos, ya que vio la segunda en el descuento final. Por arreones, El Ejido dejó varios balones atrás en el área sin rematador, primero de Martín, después de Cubo, en el que se adelantó Borja ante Dani Cara, y por último de Ocaña.

Antes del descanso apretó un poco más el cuadro ejidense y dispuso de dos ocasiones claras y se le anuló un gol. Había encontrado una mina con las subidas de Ocaña precisamente, que se internó en el área y chutó al lateral de la red muy presionado, y que la metió dentro en el 44, pero con el banderín de Frigols Sancho arriba señalando posición antirreglamentaria que no era tal. Antes, un control sobresaliente con el pecho de David Fernández, que se quedó arriba para una segunda jugada, seguido de un buen servicio atrás, dejó en perfecta posición para el disparo a Emilio Cubo, que se llenó de balón y chutó alto con todo a favor.

Nada más arrancar la segunda parte se dejó caer a la izquierda Álvaro y puso el balón en la cabeza de Airam que consiguió darle dirección a la pelota, aunque no toda la necesaria.

De nuevo por la izquierda consiguió encontrar hueco esta vez Airam Benito. El canario llegó a centrar al segundo palo y allí controló Israel Jerez, quien tardó demasiado en disparo y acabó quedándose sin la opción de anotar.

Incomprensible expulsión

Se habían invertido las tornas con respecto a la primera mitad y el peligro y cuando mejor parecían irle las cosas al conjunto verde, llegó uno de los males que está aquejando esta temporada. Jonathan Rivera, que ya tenía cartulina amarilla, usó la mano para cortar un contragolpe y con ello dejaba a su equipo con uno menos.

Es la cuarta jornada consecutiva en la que los verdes se quedan con un futbolista menos sobre el césped y es que parece que les cuesta medirse.

Corral pudo haber hecho que su equipo tuviese un impulso moral en un contragolpe que montó por la izquierda, ya que lo acompañaron tres de sus compañeros por la izquierda pero, en vez de cederles el balón, emprendió una guerra por su cuenta que obviamente no ganó.

El que si consiguió ganar el segundo palo fue Sofian para hacer el primer tanto del partido. Fue una falta sacada de forma directa que viajó a la espalda de la defensa verde. Desde allí la envió al segundo palo uno de los ejidenses y Fatah, que parece ni haber llegado al equipo de Sierra Mágina porque desde su incorporación no ha aportado absolutamente nada, dejó llegar absolutamente solo a Sofian.

Quiso tirar de garra y épica el cuadro jienense. Puso Rodolfo Bodipo línea de tres y decidió apostar por volcarse por completo en busca de la opción más desesperada.

A la desesperada

Gassama la tuvo en un mano a mano en el que tardó mucho más de la cuenta en disparar y los balones siguieron cayeron al área rival pero las ocasiones de gol brillaron por su ausencia. Más aun con el tiempo que se perdió mientras Emilio era atendido por un golpe en el rostro y más tarde cuando el propio portero salió tardísimo a despejar un balón y acabó arrollando a un jugador contrario. Podría haber visto la roja el cancerbero pero la perdonó el colegiado.

Ni con el Atlético Mancha Real en modo épico hubo forma alguna de generar ocasiones ya que los minutos que faltaban para el pitido final pasaron entre faltas innecesarias. Aun habría tiempo para la jugada estúpida del partido ya que si tonta había sido la expulsión de Jonathan Rivera aun peor fue la de Josema.

El central agarró a un adversario cuando se iba a sacar una falta y el colegiado a instancias del linier le mostró la segunda cartulina amarilla a un central madrileño que enfiló la caseta antes de tiempo. Oyó desde el túnel de vestuario cómo el trencilla daba por terminado un choque que sentencia la imposible situación de los mancharrealeños. Espero que hayan rezado los aficionados verdes durante esta semana santa ya que solo un milagro puede lograr que su equipo permanezca un año más en Segunda B.

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