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Los premiados en primer lugar estuvieron acompañados por socios del Dornillo. /S. C.
La aldea frailera de Los Rosales acoge la Jornada Gastronómica del Dornillo
ALCALÁ LA REAL

La aldea frailera de Los Rosales acoge la Jornada Gastronómica del Dornillo

Nombrados Pinches de Honor el cocinero frailero Miguel Montes y el escritor y enfermero Manuel Amezcua en un ambiente fraternal

SANTIAGO CAMPOS

Domingo, 7 de junio 2009, 04:35

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Todos los habitantes de la pequeña aldea de Los Rosales de Frailes estuvieron presentes en la XXV Jornada Gastronómica de la cofradía del Dornillo. Personas humildes donde las haya, ofrecieron sus instalaciones para poder disfrutar de un día de convivencia junto con los socios del Dornillo que en el pasado congreso gastronómica nacional celebrado en Valdepeñas de Jaén conocieron a los ciudadanos de Los Rosales, debido a que son expertos en realizar figuras de esparto, de las que una gran parte de ellas fueron escogidas por Alicia Ríos para llevarlas a un congreso antropológico en el Distrito Federal de México, el próximo mes de agosto.

La jornada comenzó sobre las 12 con la llegada de los invitados al cortijo de Los Rosales y una visita a través de la Ruta de los Milagros, dirigida por el escritor y antropólogo Manuel Amezcua, autor del libro del mismo nombre, que llevó a los interesados a visitar la pedanía de Noalejo, la Hoya del Salogral, cuna del taumaturgo santo Custodio, donde visitaron la casa donde nació y el cerro de la Mesa, donde se ha construido una ermita y se venera la imagen de la Virgen de la Cabeza, además del oratorio incrustado en la piedra donde oraba dicho santo.

Sobre las tres de la tarde se sirvió un almuerzo, compuesto por pan moreno, con aceite, habas y bacalao, además de embutidos de la matanza del Dornillo y pipirrana; con un plato fuerte compuesto de arroz caldoso con habas, espárragos y alcachofas, y los postres de sandía y cerezas de la Sierra Sur, así como leche vieja y licor de cereza.

Finalizada la comida, se hicieron los nombramientos de 'Pinches de Honor' de esta XXV jornada gastronómica, que recayeron en el escritor y antropólogo Manuel Amezcua, un enfermero que llegó pasados los años 90 del pasado siglo al distrito sanitario de Alcalá la Real de Alcalá la Real, con el encargo de reformar la sanidad alcalaína, pero se topó con la cuestión de los santones de la comarca, por lo que decidió investigar el asunto, dando como resultado el libro 'La ruta de los milagros', que es conocido en todo España y que trató un tema delicado en la Sierra Sur con delicadeza y rigor. El galardonado al recoger el premio, manifestó que en un principio quería trabajar para que las cuestiones de santería popular desaparecieran de la sanidad, pero al conocer a las gentes de esta tierra, el que cambió fue él, y añadió que ahora cree que hay muchas formas de que se curen los enfermos, y una de ellas puede ser la fe en lo que se cree.

Igualmente, fue nombrado 'Pinche de Honor' el frailero y cocinero Miguel Montes, persona humilde y autodidacta que comenzó su andadura con pocos años haciéndose panadero, más tarde emigró a las Islas Baleares, donde comenzó en la cocina de pinche real y fue escalando puestos hasta hacerse maestro cocinero, capaz de atender a hoteles con más de 2.000 comensales. De él dijo Michael Jacobs, escritor inglés que vive en Frailes, que había conocido a muchos y famosos cocineros, como Ferrán Adriá y Arzak, entrevistados por él mismo para revistas inglesas, pero que Miguel Montes tiene una gran habilidad para hacer comidas de calidad, para un batallón de 2.000 personas y lo hace casi todos los días.

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