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VÍA LIBRE

Expectación a tope

FERNANDO ARÉVALO

Jueves, 2 de abril 2009, 04:48

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EXPECTACIÓN a tope. Pese a la marejadilla de malestar por la subida de los precios, el gradón de 'La victoria' puede registrar uno de los llenos más interesantes de la temporada. La final de la Copa Federación y en contra de lo esperado, arrastra y levanta pasiones. Hay hambre de trofeo. El personal siente la necesidad de que su R.J. vista el entorchado de campeón. En las rinconeras del recuerdo se masca la nostalgia de un trofeo, el que sea.

La necesidad -que se dice- de tocar pelo. Y esta noche se abre el camino. Primer combate de la finalísima. Enfrente el biberoni del Rayo. Chavalotes que juegan en Tercera, pero que -ojo- manejan el balón con destreza y acento de peligrosidad. Así definen su juego quienes les han visto. Toque de atención: no es un equipo asequible ni se puede catalogar de pieza propicia o de pan comido. El Rayo B ha hecho méritos suficientes para llegar a una final en la que ha dejado tumbados en la cuneta a rivales de bigotes retorcidos. Además, el Rayo, como entidad, tiene y no lo disimula querencia de Copa.

Claro que lo mismo le sucede al R.J. Desde el arranque de la competición el objetivo se dibujó claro y diáfano en el horizonte, flaco Terrazas, el banquillero, fue el primero en esgrimir la apuesta de la caza y captura del suculento bolsón de los euros. Recuerden, 90 mil del ala están en juego. Habida cuenta del ruinón que invade el hábitat balompédico, ea, que a estas alturas a los trabajadores del R.J. se les deben sólo dos nóminas, huele a cosa insólita y casi a milagro. Por cierto, el partido de vuelta le podremos ver en Canal Sur, lo que no impedirá que bastantes jaeneros se peguen el viaje para saborear el vivo y directo.

Por lo demás, el movidón de la noche está empaquetado y a punto de caramelo. El eje ferial-campo-institución alberga esta noche un volcán de emociones diversas. El fiestorro primavero, juventud divino tesoro y el balón por los aires. Que los metepatas, los descerebrados y revientafiestas, no metan la pata ni jodan la gamba. Que el prójimo se divierta en libertad. Y que el dispositivo de seguridad no tenga trabajo. Sería el notición de la noche.

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