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Los ministros de Exteriores de Italia, Alemania y Bélgica.
Los países fundadores de la UE piden acelerar la salida del Reino Unido

Los países fundadores de la UE piden acelerar la salida del Reino Unido

"Este proceso tiene que empezar cuanto antes", demandan tras el triunfo del 'Brexit' en el referéndum

adolfo lorente / agencias

Sábado, 25 de junio 2016, 07:52

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Los seis países fundadores de la Unión Europea quieren que el Reino Unido empiece "lo más rápidamente posible" el proceso de salida de la Unión Europea, ha subrayado este sábado el ministro de Exteriores alemán tras una reunión con sus homólogos. "Decimos aquí, juntos, que este proceso tiene que empezar cuanto antes", ha afirmado Frank-Walter Steinmeier, quien ha comparecido junto sus homólogos Jean-Marc Ayrault (Francia), Bert Koenders (Holanda), Paolo Gentiloni (Italia), Didier Reynders (Bélgica) y Jean Asselborn (Luxemburgo).

Ese es el resultado de la reunión que han mantenido como parte del proceso de reacción ante el 'Brexit'. Ayer fue el turno de la conmoción y hoy llega el momento de levantarse y volver a caminar. Comienza la 'operación salvemos Europa'.

El ministro de Exteriores germano ha insistido en que Londres debe activar "cuanto antes" el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que es el que prevé el procedimiento para la salida de un país miembro. Los gobiernos de los restantes 27 países "no pueden reemplazar decisiones que se tienen que tomar en Londres", ha remarcado.

Por su parte, el ministro de Exteriores francés, Jean-Marc Ayrault, ha instado al primer ministro británico, David Cameron, a asumir su "responsabilidad" por la decisión de convocar el referéndum y ha recalcado que hay "cierta urgencia" para que se ponga en marcha el proceso de salida. Por un lado, ha argumentado el ministro galo, porque también "los otros 27 deben ser respetados", y por otro porque un retraso en la invocación del artículo 50 tendría "consecuencias" de carácter económico y social para todas las partes.

En este mismo sentido, el ministro de Exteriores holandés, Bert Koenders, ha pedido que "las conversaciones empiecen, con buena voluntad, cuanto antes". El titular luxemburgués, Jean Asselborn, ha explicado en este contexto que no sería positivo "cuatro meses o más de incertidumbre" hasta que se pongan en marcha la negociación de la UE con Reino Unido y ha deseado que nadie ahora en Londres trate de "jugar al gato y al ratón".

Rendición de cuentas

El 'Brexit' provoca la dimisión del comisario europeo de Finanzas

  • El político conservador británico Jonathan Hill ha dimitido hoy de su cargo como comisario europeo de Estabilidad Financiera, Servicios Financieros y Mercado de Capitales de la Unión Europea (UE), después de que el Reino Unido votara por el 'Brexit'. "A la luz del resultado del referéndum, es correcto que dimita", ha anunciado en su cuenta de Twitter.

  • En un comunicado, Hill, que asumió el cargo en noviembre de 2014, precisa que trabajará con el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean Claude Juncker, en las próximas semanas para asegurar "un relevo ordenado". "Como muchas personas en el Reino Unido, lógicamente estoy muy decepcionado con el resultado del referéndum", afirma Hill, que confiesa que le hubiera gustado "que acabara de otra manera". "Pero el pueblo británico opinó de forma distinta, y así funciona la democracia", constata.

  • "Al avanzar hacia una nueva fase, no creo que sea correcto que yo siga como comisario británico como si nada hubiera pasado", explica el político 'tory' (conservador), para confirmar que, en consecuencia, ha comunicado a Juncker su decisión de dimitir.

  • Hill agradece al presidente la oportunidad que le dio de trabajar en servicios financieros y de "ayudar a apoyar el empleo y el crecimiento en Europa". "Vine a Bruselas siendo alguien que hizo campaña en contra de que el Reino Unido adoptara el euro y que era escéptico sobre la UE", explica en su nota de despedida. "Pero me voy convenido de que, a pesar de las frustraciones, nuestra pertenencia era buena para nuestro lugar en el mundo y para nuestra economía", sostiene. "Lo que está hecho no puede deshacerse y ahora tenemos que ponernos a trabajar para hacer que nuestra relación con Europa funcione lo mejor posible", concluye.

  • El vicepresidente de la Comisión Europea Valdis Dombrovskis asumirá la cartera, ha anunciado Juncker.

Steinmeier ha resaltado que los gobiernos europeos deben demostrar ahora a sus ciudadanos que Europa es "necesaria" y que está "operativa" tras el 'Brexit', por lo que hay que ofrecerles "resultados concretos". Los temas sobre los que hay que rendir cuentas son la crisis de los refugiados, el alto desempleo y crecimiento anémico en el sur de Europa y las cuestiones de seguridad ante la amenaza del terrorismo yihadista, ha enfatizado.

El ministro de Exteriores italiano, Paolo Gentiloni, ha asegurado que los europeos quieren "ver una perspectiva de futuro", mientras que su colega francés, Jean-Marc Ayrault, ha llamado a recuperar el "espíritu de los padres fundadores" y los valores que inspiraron el proyecto europeo en un primer momento, tras la II Guerra Mundial. "Tenemos que avanzar", ha afirmado por su parte el ministro de Exteriores de Holanda, Bert Koenders, que ha apostado por una "unión efectiva" y por cierta "flexibilidad" dentro de la UE. Sobre este último punto ha ahondado el titular belga, Didier Reynders, quien ha explicado que "no es nuevo" que ciertos grupos de países dentro de la UE avancen a distintas velocidades, como lo demuestra la eurozona y el espacio Schengen, y ha considerado que esa es la vía para el futuro del bloque. El ministro de Exteriores belga ha abogado así por estrechar la cooperación "en algunos campos con menos miembros".

La premura fue también la nota preponderante en las declaraciones efectuadas por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker a la televisión alemana ARD. La salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) no va a ser un divorcio amistoso, advirtió Juncker, que ha pedido a Londres que presente "inmediatamente" su petición de abandono. "No es un divorcio amistoso pero al fin y al cabo tampoco era una gran relación amorosa", declaró. "No entiendo por qué el Gobierno británico necesita esperar hasta el mes de octubre para decidir si envía o no la carta de divorcio a Bruselas. Me gustaría tenerla inmediatamente", insistió.

Sin embargo y pese a la intención de los países fundadores de la UE para acelerar el proceso, el director de la campaña 'Vote Leave' ('Vota Salir'), Matthew Elliott, ha declarado este sábado que no tiene una prisa especial por invocar el artículo 50 del Tratado de Lisboa que activaría el procedimiento de salida de la Unión Europea. "No creemos que haga falta invocar el artículo tan rápido. Lo mejor es esperar a que se calme la situación a lo largo del verano, tiempo durante el cual podría haber negociaciones informales con estados miembros", añadió. Además, Elliott declaró que el acuerdo debería cubrir todos los aspectos que hasta ahora han guiado la relación entre el país y el bloque, entre ellos la contribución británica a la UE, el acceso al mercado único, y el llamado "pasaporte europeo" que integra las relaciones financieras.

"Out is out"

El jueves, cuando el sol bruselense se ponía pasadas las diez de la noche, los 'whatsapp' de altos funcionarios europeos eran relativamente optimistas. "Al final parece que se quedan, pero llevar el acuerdo alcanzado en la cumbre de febrero no será nada fácil", aseguraba un destacado cargo comunitario. El mal menor era llevar a la práctica ese polémico pacto consensuado por los líderes para evitar el temido 'Brexit' y que ahora ha quedado en papel mojado. Nadie esperaba el caos. Y sí, había culpables. Todos los comentarios apuntaban a David Cameron, el gran enemigo de la UE pese a liderar la campaña por la permanencia. Ya era demasiado tarde. 'Good bye Europa'.

La gran reunión del cónclave comunitario estaba prevista a las 10.30 horas. Demasiado tarde. El mundo se había paralizado desde las 6 de la mañana y había que salir a lanzar el mensaje que todos querían escuchar. Lo hizo Tusk. Eran las 8.40 horas. "Es una situación muy grave e incluso dramática, pero lo que no mata te hace más fuerte. En nombre de los líderes puedo decir que estamos determinados a mantener nuestra unidad como Veintisiete. Para todos nosotros, la Unión es el marco de nuestro futuro común", zanjó. "Es un momento histórico en el que tenemos que evitar las reacciones histéricas. No habrá un vacío legal. Estamos preparados", recalcó el máximo responsable del Consejo antes de anunciar que el miércoles, en los márgenes de la cumbre de los 28, se reunirán por primera vez los jefes de Estado y de gobierno de los 27. Cameron se quedará fuera. "Out is out", recuerden.

Mensajes a Londres

Antes, a las 8.00, se reunió la conferencia de presidentes del Parlamento Europeo. No hay que olvidar que será un actor clave en toda la negociación que ahora comienza ya que deberá ratificar el futuro pacto de salida del Reino Unido. Y aquí, la gran coalición entre populares, socialistas y liberales conforma un bloque de enorme solidez. Regalos habrá los justos. Porque si hay una institución donde los euroescépticos y los eurófobobos llevan usando como campo de batalla ésa es la Eurocámara.

La gran cita de ayer comenzó pasadas las 10.30 horas en el Berlaymont, en la sede del Ejecutivo comunitario. Estaba Juncker, Tusk, el presidente del Parlamento, Martin Schulz y el primer ministro holandés, Mark Rutte, que ejerce la presidencia de turno de la UE. Ante los medios, sólo salió el presidente de la Comisión. Hay semblantes que dicen más que mil discursos y el de Juncker, un europeísta hasta la médula, era todo un poema. Leyó una breve declaración de cinco párrafos y lo hizo en inglés, para que le entendieran perfectamente al otro lado del Canal de la Mancha.

Nada más empezar, levantó la vista y confesó que "personalmente, era un día muy triste". Luego, continuó leyendo. Despacio, poniendo el énfasis en los mensajes que Europa quería lanzar a Londres. Primero y principal. "No habrá renegociación de lo acordado", advierte el texto firmado por los cuatro. "Out is out", advirtió Juncker la víspera. Fuera es fuera. La frase no es baladí, puesto que la decisión del Gobierno británico de esperar al menos hasta octubre para solicitar la salida hace pensar a más de uno que hay gato encerrado y que es probable que se busquen planes alternativos a la desesperada.

"Lamentamos la decisión pero respetamos la voluntad del pueblo británico. Por muy doloroso que pueda resultar, es necesario empezar el proceso de desconexión lo más rápidamente posible para evitar la incertidumbre", recalcan. Ya nada será como antes y cuanto antes se asuma por todos, mejor. Respecto al futuro encaje legal de Reino Unido, mostraron su deseo de "tenerlo como un socio cercano", pero matizaron que "cualquier acuerdo que se celebre como país tercero tendrá que reflejar los intereses de ambas partes y ser equilibrado en cuanto a derechos y obligaciones". Lo dicho. Nada será igual.

Pero tan importantes eran los mensajes hacia Londres como los dirigidos a fortalecer una autoestima herida. "La Unión de los 27 Estados miembros continuará para generar crecimiento, incrementar la prosperidad y garantizar un entorno seguro para nuestros ciudadanos", recalcó Juncker. Sólo aceptó dos preguntas. La primera, del eje francoalemán. "Me gustaría una toma de posición muy clara para que el proceso de incertidumbre en el que entramos no dure demasiado", dijo. La segunda, formulada por la BBC, fue sencilla. ¿Es el principio del fin de la UE? "No. Good bye", respondió mientras abandonaba la sala entre aplausos de los muchos funcionarios congregados.

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