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Voluntarios de la oenegé Toestand y Anaquerando trabajan en el parque 28 de Febrero. Ramón L. Pérez
La Zona Norte aspira a un 'pellizco' de los 170 millones de la UE para inclusión social

La Zona Norte aspira a un 'pellizco' de los 170 millones de la UE para inclusión social

Las asociaciones y vecinos calculan que el plan de transformación social en Rey Badis, Cartuja, Almanjáyar y la Paz puede aspirara recibir hasta ocho millones

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Lunes, 18 de septiembre 2017, 01:35

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La Zona Norte de Granada sigue con su objetivo de dar una lección a la ciudad de Granada y avanzar en su proceso de transformación social gracias a los programas de inclusión. La Zona Norte, Rey Badis, Cartuja, Almanjáyar y La Paz aspiran para ello a recibir un buen pellizco de los 170 millones de euros que la Unión Europea ha concedido a la Junta de Andalucía para distribuir en proyectos dirigidos a trabajar en zonas necesitadas de transformación social.

La Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, que encabeza la socialista María José Sánchez Rubio, asegura que «la estrategia de Andalucía en zonas desfavorecidas mejorará las condiciones de vida de sus residentes». Entre los años 2000 y 2016 se han destinado un total de 132,3 millones de euros a subvenciones para actuaciones de esta naturaleza.

  • 169,3 Millones de la UE a la Junta de Andalucía para transformación social hasta el año 2022.

  • 132,3 Millones de euros invirtió la Junta de Andalucía en inclusión en el periodo entre 2000 y 2016.

En concreto, en 2015 y 2016 se pusieron en marcha 178 proyectos en 78 zonas de transformación social repartidas por 36 localidades andaluzas. En ellos participaron 137 entidades distintas. Son un total de 664 actuaciones distribuidas entre acciones sociofamiliares (15,51%), empleo y formación (14,91%) y ocio y tiempo libre (11,90%). En la provincia de Granada se actuó en seis zonas -dos de ellas en la capital, Santa Adela y Norte- en las que se han realizado 71 intervenciones con una inversión de algo más de 1,8 millones de euros, 46 de ellas en la capital.

Con estos datos en la mano, a pie de calle, en los barrios del Distrito Norte de Granada se entiende que anden a la búsqueda de al menos una parte del dinero que la Unión Europea ha enviado a Sevilla para repartir por todos estos lugares que trabajan para intentar volver a ver la luz.

En tres fases

La iniciativa europea, denominada programa de actuación integral en zonas desfavorecidas, tiene un presupuesto nunca visto hasta ahora, 170 millones de euros (en concreto, 169,3) para el periodo 2017-2022. Es decir, 170 millones para repartir en actuaciones durante cinco años frente a los 132,3 millones destinados en los últimos quince años. En lo que concierne a Andalucía, la inversión de la Unión Europea multiplica casi por cuatro la que ha existido hasta ahora para las zonas de transformación social.

Para ello es necesario elaborar programas especiales que justifiquen la necesidad de inversión, requisito indispensable para las autoridades europeas. Desde la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales explican que este tipo de proyectos «requiere la implicación, participación y colaboración de todos los agentes intervinientes en las diferentes zonas con necesidades de transformación, constituyendo en este ámbito las entidades locales el eje vertebrador de la acción local».

Igualmente, añaden, «es clave la participación ciudadana en todo el proceso, porque si las entidades locales deben ser el soporte donde pivote la acción social municipal, las necesidades, expectativas y potencialidades de las personas residentes en las zonas deben ser el eje donde se sitúe y centre la intervención de todas las entidades públicas y probadas que trabajen en las zonas».

La consejera de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta, María José Sánchez Rubio, señala que la Junta está en el proceso de elaborar un diagnóstico de las zonas desfavorecidas con el fin de poner en marcha el mapa de servicios sociales que prevé la nueva Ley -en vigor desde enero de este año-, en el que se tendrán en cuenta criterios demográficos, geográficos, de organización, de comunicaciones y sociales. Sánchez Rubio ha vuelto a insistir en que el objetivo es «lograr la plena igualdad de oportunidades al margen del lugar donde se vive».

Una segunda fase conllevará la elaboración por parte de los ayuntamientos de los planes locales de inclusión en las zonas de transformación social identificadas en el mapa que ya elabora la Junta. Se establece para ello «la necesaria participación en el diseño de estos planes de los agentes sociales que intervienen en dichas zonas, así como una adecuada integración de las experiencias o actuaciones que se están desarrollando en el ámbito local en esta materia».

La tercera fase dará respuesta a las medidas recogidas en los planes locales, «desarrollándose en el horizonte temporal de cuatro años (2018-2023), llevándose a cabo, entre otras, las actuaciones encaminadas a la inserción sociolaboral de personas en situación o riesgo de exclusión social a través de la activación y de itinerarios integrados y personalizados de inserción laboral y social mediante la contratación de profesionales que harán las labores de acompañamiento».

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