Edición

Borrar
La imagen de San Antonio Abad y la Santa Cruz saliendo de la iglesia.
Torvizcón se prepara para celebrar sus fiestas patronales en honor a San Antonio Abad

Torvizcón se prepara para celebrar sus fiestas patronales en honor a San Antonio Abad

En este municipio alpujarreño tienen por costumbre criar varios marranicos para, una vez cebados, sortearlos en las fiestas para recaudar fondos y poder sufragar algunos gastos de los festejos

RAFAEL VÍLCHEZ

TORVIZCÓN

Viernes, 12 de enero 2018, 07:51

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El municipio alpujarreño de Torvizcón se prepara para celebrar sus famosas fiestas en honor a San Antonio Abad los días 19, 20 y 21 del presente mes de enero. Las mayordomas y mayordomos de estas fiestas son: María del Carmen Jiménez, Dolores Carrasco, J. Miguel Cañadas, Antonio Ruiz y Paulino Peregrin. Antes de las fiestas, el día 13, a las siete de la tarde tendrá lugar en la iglesia la ‘bajada’ de la imagen de San Antonio con la actuación del coro rociero ‘Al-Badul’, y la invitación a buñuelos con chocolate por parte de los mayordomos de las fiestas.

Los días 16, 17 y 18 a las seis y media de la tarde habrá triduo en honor del patrón de Torvizcón. El día 19 habrá repique de campanas y cohetes, tapeo amenizado por el ‘Dúo Cantares’, encendido del alumbrado, la quinta edición de la gala y entrega de los premios ‘Viña de Oro’ a las siete y media de la tarde (el programa de fiestas no recoge quienes serán los homenajeados), repique de campanas y encendido de muchísimos ‘chiscos’ (hogueras), y verbena con la orquesta ‘Buda’ y DJ Esteban-M.

El sábado día 20 habrá diana a cargo de la banda de música ‘Costa Tropical’, misa a las doce del medio día seguida de la procesión en honor a San Antonio Abad y la Santa Cruz, comida popular, corrida de cintas, merienda, actuación de Carlos Salati y Vedette, y baile con las orquestas ‘Mediterráneo’ y ‘Odysseus’. El día 21 habrá diana, misa y procesión, comida popular en la carpa, minidisco para pequeños y mayores, actuación del ‘Grupo Sureste’ , cena-tapeo y baile hasta que los cuerpos aguanten.

Torvizcón se encuentra en una ladera de la Sierra de la Contraviesa. Tiene 51 kilómetros cuadrados de superficie y su población ronda las 1.000 almas. Existen varias versiones sobre el origen de Torvizcón, una de ellas se atribuye según algunos estudiosos a la existencia hace siglos de un torreón junto a la iglesia parroquial y antigua mezquita, perteneciente a los condes de Coloma y Cifuentes. Según otra versión puede provenir de una planta aromática muy abundante en la zona llamada torvisco.

Torvizcón, el pueblo del buen vino y la excelente almendra, ya existía en época del imperio romano con el nombre de Turidiamun (ciudad favorita del sol). Desde el siglo XIII al XV se sometió al dominio nazarita encuadrado dentro de la Tahá del Céhel. En el siglo XVIII tras la conquista cristiana el señorío pasó al conde de Cifuentes, convirtiéndose en el lugar más importante de la comarca y en cabeza de partido, por lo que recibió el título de villa. A los vecinos de Torvizcón les suelen llamar también ‘mayoyos’.

Junto a la Casa Consistorial de Torvizcón y frente a la plaza y el cuartel de la Guardia Civil, existe una fuente construida en el siglo XVIII, llamada popularmente ‘El Pilón’, con frontal triangular y mascarón en el centro, con varias cabezas de león. También, desde hace unos años la plaza luce una impresionante fuente costeada por la Diputación cuando la presidía Sebastián Pérez Ortiz. La iglesia consagrada a Nuestra Señora del Rosario es la más importante pieza arquitectónica, edificada en estilo mudéjar durante el siglo XVI.

Hace varias décadas, un vecino de Torvizcón ya desaparecido, Agustín Góngora, creó con sus propias manos el Museo del Esparto, situado en la parte alta del pueblo. Torvizcón posee un ramillete de rutas del vino que van a parar a numerosos cortijos de la zona donde existen bodegas familiares. También, en plena Sierra de la Contraviesa, se encuentra desde hace unos años el Centro Temático del Vino Alpujárride, ubicado en la finca de Juan de Reyes, que dispone también de restaurante y tienda de productos alpujarreños. En el núcleo urbano de Torvizcón existen lugares para saborear deliciosos platos, descansar y realizar senderismo y deporte, entre otras cosas.

Las fiestas en honor a San Antonio Abad, que se celebran a mediados de enero, están declaradas de interés turístico nacional. Es una fiesta muy peculiar por lo variopinto de sus tradiciones con la quema de los chiscos (hogueras), o la crianza entre todos los vecinos de uno o dos marranicos que hasta hace unos años iban sueltos por las calles con un lazo rojo en el pescuezo para que la gente le ofreciera comida. Ahora en cambio los dos cerdos que serán sorteados en las fiestas y que se crían cada año durante unos meses, permanecen en una especie de casita-cuadra que le construyó el Ayuntamiento, presidido por Juan David Moreno. A muchos vecinos les encantarían ver corretear a los cerdos por el pueblo, como antes sucedía. En cambio, a otros no, porque aseguran que ensuciaban las calles del pueblo.

Estas fiestas han sido potenciadas y dadas a conocer a través de otros eventos, encuentros, entrega de premios y reconocimientos… por el actual alcalde de Torvizcón, un municipio fabuloso con un extenso término municipal salpicado de bodegas familiares, cortijos y cortijadas, rutas y senderos, viñedos, almendrales e higuerales, principalmente. Muchísimas personas, algunas muy famosas, acuden a esta localidad famosa también por la empresa ‘Muebles Hurtado’ y por el Museo del Esparto, creado por el recordado Agustín Góngora, para, y entre otras cosas, degustar su gastronomía, adquirir algunos productos, recorrer el casco urbano, conocer los festejos, hacer deporte, descansar, etcétera.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios