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Isaac Barranco, en su bar cafetería de Vegas del Genil.
«Desde el mes de junio han entrado tres veces a robar en mi bar»

«Desde el mes de junio han entrado tres veces a robar en mi bar»

Vecinos de Vegas del Genil e IU denuncian la situación de inseguridad que vive el pueblo, mientras que el alcalde minimiza los sucesos, que califica de gamberradas

INMA SÁNCHEZ

Miércoles, 12 de noviembre 2014, 00:15

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Isaac Barranco es el propietario de la cafetería bar Duende de Purchil, ubicada a menos de cien metros del Ayuntamiento de Vegas Del Genil. En la noche de Halloween entraron por tercera vez a su establecimiento; la primera fue en junio. «Llegué sobre las 04.30 para enchufar la cafetera y organizar las cosas. Cuando intenté abrir la puerta del patio estaba puesto el pestillo. Entré por la otra puerta y vi a alguien salir corriendo». Pero no pudo reconocerlo. Dice que la última vez saltaron por el patio, rompieron el bombín y quitaron la alarma. En las dos primeras ocasiones accedieron al local por una ventana pequeña. Sabían dónde tiene la central de la alarma. Le han robado el portátil de su mujer, han roto la máquina del tabaco y la tragaperras, se han llevado licores y dinero. La Guardia Civil tomó las huellas y la investigación sigue abierta. Solo en alarmas se ha gastado mil euros

Desde hace unos meses, Vegas Del Genil esta sufriendo muchos robos en calles y establecimientos, incendios de automóviles y actos de vandalismo. Hasta tal punto que el grupo municipal de IU ha pedido que se declare el Estado de Alarma. Dicen que los vecinos no comprenden que el alcalde no le dé importancia, cuando se queman coches, transformadores, que la gente está cansada de que un «pueblo tranquilo sufra esta oleada de delincuencia».

José Aranda, alcalde popular de Vegas del Genil, ha convocado una Junta Local de Seguridad, aunque minimiza los sucesos porque considera que «no son de relevancia». Dice que lo que pasó en Ambroz, núcleo de población de Vegas, son fechorías de jóvenes «aburridos, inconscientes de que sus actos pueden desembocar en algo serio». Nada diferente a lo que ocurre en otros pueblos del Área Metropolitana, y que «no estamos ante un caso de violencia extrema como denuncia IU», a los que tacha de «inconscientes» que por interés político, por ganar un voto, «salen en los medios de comunicación diciendo que hay que declarar el Estado de Alarma, algo que no se ha hecho en ningún pueblo de los alrededores». Insiste en no ver conveniente esa forma de hacer política para crear alarma social y que lo que sucede es un «problema puntual de vandalismo». Considera que hay que estudiar y analizar la situación para intentar poner remedio. Reconoce los robos producidos en viviendas y establecimientos, y los desperfectos sufridos en el mobiliario urbano, como prenderle fuego a contenedores y que incluso un coche llegó a arder.

Lamenta que la coalición haya metido a la policía local por medio. Admite que falta personal, que Vegas tendría que tener 14 o 15 agentes, y que los convenios no están claros para establecer los criterios en cuanto a horarios y a mejorar las condiciones de trabajo. Reconoce que es la plantilla de la provincia que menos cobra. Su objetivo es convocar dos plazas de policía local lo antes posible, pero que la normativa es muy exigente y que a partir de seis efectivos hay que hacer una jefatura nueva. Una situación complicada ante los problemas económicos del Ayuntamiento.

Alejandro Martín Romero es el edil de IU que ha denunciado la «incapacidad» del equipo de gobierno para atajar la situación», dice que no quiere politizarlo, solo que se solucione. Los miembros de la coalición pretenden realizar un informe con la Policía Local, adjuntarlo a las firmas de los vecinos y trasladarlo a Diputación, la Subdelegación del Gobierno y la Junta de Andalucía. Martín Romero denuncia que para una población de casi 14.000 personas hay solo cuatro policías que trabajan de ocho a tres de la tarde; que la Guardia Civil opera en un radio muy amplio por lo que la patrulla tarda una hora en llegar al municipio. Insiste en que la gente está «atemorizada» ante lo que sucede cuando Vegas ha sido siempre un municipio tranquilo, «un pueblo muy pueblo».

«Vendidos»

Explica que los vecinos se sienten «vendidos» y que muchos están redoblando la seguridad de sus casas, poniendo doble cerradura y reforzando puertas y ventanas «porque no están tranquilos».

El primer fin de semana de octubre, durante las fiestas de Ambroz, se dedicaron a romper los buzones de las viviendas y las luces, además de inutilizar las puertas de las cocheras con palillos. Insiste en que la inseguridad es por la noche. El edil exculpa a la policía local de lo que sucede, asegura que los agentes «se sienten abandonados por la Alcaldía» y que no les pagan las horas extras.

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