La Policía Local desmonta la gran carpa ubicada en Cartuja sin permiso alguno

Pero el Ayuntamiento espera que, tras el desmantelamiento de la más grande de ellas en menos de 24 horas desde que se anunciaron las medidas, sean los propios dueños las que las desmonten sin necesidad de que intervengan los agentes.

Hay que tener en cuenta que esta medida es bastante gravosa para los propietarios de las carpas. Se traduce en que si los propietarios no las quitan de forma voluntaria, es el Ayuntamiento el que las desmantela y quien se las queda en custodia. Los dueños no pueden recuperarlas hasta que abonen la correspondiente multa, que puede llegar a superar los setecientos euros porque está tipificada como falta grave. Además, tienen que costear los gastos ocasionados por la retirada de estas carpas.

La operación comenzó ayer a las cuatro de la tarde. Un camión de carga con una cuadrilla de operarios de la empresa subcontratada por el municipio para la ejecución subsidiaria de este tipo de tareas se personó en la plaza que hay entre las calles Sor Barranco y José María Miranda Serrano, detrás del Centro Cívico Norte, y comenzaron a desmantelar la gran carpa, bajo la atenta protección de un fuerte dispositivo policial compuesto por agentes tanto de la Policía Local como de la Policía Nacional.

La llegada de los operarios acompañados del amplio dispositivo policial reunió a numerosos vecinos de todas las edades en la plaza. Hubo algunos nervios y algunas preguntas, pero el responsable policial dejó claro desde el principio el objetivo y ante el contumaz despliegue de los agentes antidisturbios, el vecindario se limitó a contemplar el desmantelamiento a una distancia prudencial.

Al menos seis vehículos policiales con una veintena de agentes custodiaron los trabajos. Dos de los agentes de la Policía Local patrullaban las esquinas de la plaza con fusiles lanza pelotas de goma. A la media hora, con la situación normalizada, la Policía Nacional, que actuaba de apoyo, se retiró. Dos horas después de que comenzara la intervención, pasadas las seis de la tarde, el camión estaba cargado con todos los elementos de la gran carpa que acababa de ser desmantelada.

Los dueños de las otras cuatro carpas que todavía están instaladas fueron notificados ayer mismo por la tarde por segunda vez para que las retiraran. El Ayuntamiento espera que, al ser mucho más pequeñas, sean retiradas por los propios responsables. Por si acaso, informó ayer a este periódico la Policía Local, «mañana a las nueve de la mañana vamos a volver al distrito Norte a desmantelar las otras cuatro jaimas restantes. Queremos que la actuación sea inmediata y que quede restituido el dominio público de inmediato».

También criticó que los vecinos argumentaran que «todos los años las hemos puesto y no ha pasado nada, porque quiere decir que nadie en el Ayuntamiento se había preocupado de este tema hasta ahora».