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Martes, 24 de octubre 2017, 11:46
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Los padres de un menor de ocho años que padece un 39% de discapacidad cognitiva han denunciado a la monitora de un grupo de 'scouts' de la provincia de Granada por un presunto delito de maltrato contra su hijo. El Juzgado de Instrucción número 8 es el encargado del caso y el que celebrará la vista oral el próximo 22 de diciembre por este delito leve.
Tal y como ha avanzado hoy IDEAL en exclusiva en su edición impresa, los hechos se precipitaron el pasado mes de junio cuando, según cuenta el padre, al menor le condicionaron la asistencia a un campamento de verano si iba acompañado de una persona las 24 horas del día durante su estancia con el grupo de 'scouts'. Antes de imponerle esta condición para formar parte del pasado campamento de verano en Granada, los padres habían detectado la presencia de moratones en el brazo y muñeca del menor y, según consta en la denuncia, el pequeño había señalado a la monitora del grupo como la presunta causante de los mismos el pasado mes de mayo.
La directora del centro donde estudia el menor, la pedagoga terapeuta y una trabajadora social habían llamado al padre para advertirle de la presencia de esos moratones. No lo hicieron las tres profesionales al mismo tiempo sino cada uno por su cuenta y sin saber que cada uno de ellas había descubierto este problema en el menor.
Los padres del pequeño decidieron presentar la correspondiente denuncia en la comisaría centro de la Policía Nacional. Sitúan los hechos en el 14 de mayo del presente año en un colegio de la capital granadina, donde este grupo de 'scouts' se hallaba concentrado en la citada fecha.
Los padres cuentan en la denuncia que su hijo les había comentado que los moratones se los había producido la monitora al cogerlo del brazo con fuerza para subirlo al autobús y después de castigarlo por romper un vaso de cristal. Es la versión del menor, que fue muy similar a la facilitada en su día por el pequeño a las tres profesionales que habitualmente lo atienden en su centro educativo. Las tres profesionales han sido citadas por los padres del menor como testigos.
Los padres del pequeño presentaron la denuncia varias semanas después de que su hijo apareciera con los moratones, lo cual ha impedido aportar parte de lesiones de esos moratones, aunque sí hay testimonios fotográficos que acreditan este presunto episodio de maltrato, según ha contado el padre.
Tras prestar declaración en el juzgado, la parte denunciada siempre ha negado los hechos con rotundidad, aunque los padres comentaron en la denuncia que si bien en un primer momento la monitora lo negó todo, «sí reconoció el haberlo agarrado del brazo» pudiéndole generar algún tipo de daño. Los padres dicen que esa declaración la tienen grabada, por si llegado el caso necesitaran utilizarla en el juicio.
Este periódico contactó ayer con la persona denunciada, la monitora del grupo de 'scouts', por si quería pronunciarse sobre estos hechos pero prefirió por no hacerlo hasta no hablar con su abogado. Aunque sí manifestó que en sede judicial negó todas las acusaciones vertidas contra ella por esta causa.
El menor se encuentra bien aunque bastante dolido, según ha manifestado el padre, porque le impidieran acudir al campamento del verano pasado a no ser que fuera acompañado de un monitor que se ocupara de él las 24 horas del día.
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