La huelga de examinadores de la DGT dejará sin hacer 600 pruebas a la semana en septiembre

Antes de ayer, durante casi cuatro horas de reunión, el director de la DGT, Gregorio Serrano, reiteró al colectivo examinador que su organismo «no tiene competencias para autorizar la subida retributiva que piden los examinadores, obteniendo por respuesta del ministerio de Hacienda -competente para autorizar la subida- que no se pueden aprobar subidas salariales al margen del resto de funcionarios del Estado que también aspiran a dichas subidas retributivas».

El comité de huelga, por su parte, manifestó que el director de la DGT insistió en que es «justo seguir luchando» por la subida salarial reclamada por los examinadores, pero que les recalcó que no pueden «pedir lo que no tenemos». Al respecto, Asextra aseguró en un comunicado que la DGT no ofreció ninguna propuesta para negociar la desconvocatoria de la huelga.

En la reunión celebrada antes de ayer en Madrid, la DGT y el comité de huelga de Asextra valoraron la posibilidad de fijar unos servicios mínimos durante los días que dure la huelga, a pesar de que los examinadores siguen planteando que no se trata de una tarea esencial y, por tanto, no se debe pactar o imponer ningún porcentaje de servicios mínimos durante el paro. En este encuentro, el director de la DGT manifestó la intención de establecer un 65% de trabajadores durante la huelga, mientras que el comité de Asextra aseguró que no pactaría unos servicios mínimos por encima del 20%. Tras un receso, la DGT planteó que estos fueran del 50%, sin que Tráfico recibiera una contraoferta por parte de los examinadores, que cerraron la reunión sin ningún acuerdo con la administración.

El presidente la asociación provincial de autoescuelas, José Blas Valero, manifestó ayer que si se mantiene el paro para dentro de dos semanas se va a generar «una situación más que complicada» para el sector en la provincia de Granada, en donde según Valero todavía no ha tenido que cerrar ninguna empresa, aunque sí reconoce el «ahogo» al que la huelga de examinadores está sometiendo a las autoescuelas con «notables pérdidas de alumnos durante el verano» un periodo del año en el que tradicionalmente la cifra de estudiantes del carnet de conducir se incrementa. Valero volvió a considerar que las pérdidas en la provincia rondan los 1,2 millones hasta el momento, pero teme que sean mayores si la DGT o los examinadores no dan su brazo a torcer en el conflicto y agradeció que un sector del colectivo de examinadores esté decidiendo no ir a la huelga «por el daño que se está haciendo a las autoescuelas» y el gesto de sólo convocar huelga los lunes, martes y miércoles durante septiembre.

El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández, también reclamó ayer a la DGT que adopte «medidas de forma urgente» para normalizar la situación del colectivo de examinadores de tráfico, ya que según la institución, este conflicto «tiene visos de agravarse en los próximos meses» si se lleva a cabo la huelga.