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Oblak atrapa un balón durante el Atlético-Bayern del miércoles.
El candado que desespera al fútbol combinativo
ATLÉTICO DE MADRId

El candado que desespera al fútbol combinativo

Oblak mantuvo su meta a cero por trigésima vez esta campaña, octava en la Champions, y desquició a un Bayern que se quejó del césped

RODRIGO ERRASTI

Jueves, 28 de abril 2016, 18:09

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«No fue nuestra noche», decía el Bayern en sus redes sociales junto a un gif animado en el que Mickey Mouse no paraba de abrir puertas pero se encontraba siempre con otra nueva. Con esa sensación se fueron del Calderón los jugadores del equipo bávaro, conscientes de que fueron penalizados por su mal inicio y después al no encontrar la manera de batir a Jan Oblak.

«Tuvimos un montón de ocasiones en la segunda mitad. Lo hicimos bastante bien, pero al final no fue suficiente», se lamentó David Alaba, que no se quejó de la agresividad de un Atlético que hizo siete faltas en todo el partido y sólo una en la segunda parte, cuando más sufría ante la insistencia teutona. «En la segunda parte hemos jugado bastante bien y hemos merecido al menos un gol, pero su defensa y Oblak ha estado muy bien», afirmó Javi Martínez.

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Marcar al Atlético es una misión realmente complicada porque el esloveno ha dejado la meta a cero en 30 duelos de esta campaña, de ellos ocho en Champions, por lo que es ya el portero atlético con más partidos continentales en una temporada, tras superar los siete de Miguel Reina en la recordada 1973-74. «Todo el equipo demostró que merece estar aquí, en semifinales», dijo el meta, antes de recordar que «el Bayern es un equipo muy grand». «Esperamos un partido muy difícil allí», avisó sobre un rival que con Pep Guardiola cambia mucho cuando juega lejos de Múnich. En las tres semifinales de Champions League a domicilio que el técnico catalán ha dirigido al Bayern encajó tres derrotas y no marcó ni un solo gol. Y en esta edición su equipo, pese a lo vistoso de su fútbol, no ha ganado fuera ni a Atlético, ni a Benfica, ni a Juventus. Ni tampoco en la fase de grupos al Arsenal, que también le derrotó dejándole si anotar (2-0).

Se nota al bloque atlético cauteloso pero con más optimismo que miedo. Ahora mismo suma 33 partidos sin recibir gol en toda la campaña, el equipo que más veces ha secado al rival de las grandes cinco ligas. «En el segundo tiempo defendimos porque el rival hizo un juego muy bueno», apuntó Simeone. Es una constante desde que llegó el argentino en 2012. El Atlético ha jugado 17 partidos de Champions en casa y en 14 no ha recibido goles. Es más, ha mantenido la portería a cero en 12 de sus 13 últimos partidos en Calderón, algo que sólo rompió el Benfica en una derrota (1-2) durante la fase de grupos. De hecho, en las fases de KO se ha mostrado inexpugnable: séptima eliminatoria seguida que no encaja ante su afición, frente a Barcelona (2013-14 y 2015-16), Chelsea, Bayer Leverkusen, Real Madrid, PSV y ahora Bayern.

La fuerza del Allianz

El esfuerzo para lograrlo fue más titánico que nunca. «Hicimos un gran partido. Todo el mundo defendió y atacó. Esa es nuestra fuerza y nuestra mentalidad», aseguró Antoine Griezmann. «Es uno de los partidos más difíciles que he jugado en mi vida. Ha sido un partido intenso, dificilísimo, muy táctico», reconoció Filipe Luis. «El Bayern llega con muchos jugadores de segunda línea al área y es muy complicado pararles. Sabíamos que teníamos que hacer un partido muy sólido», confirmó el lateral brasileño.

Los rojiblancos saben que los bávaros ya han remontado en Múnich, como un 3-1 al Oporto la pasada campaña en cuartos, algo que Óliver Torres, baja por fiebre el miércoles, les recordó en el vestuario a sus compañeros. «Si hubiéramos metido el segundo mejor, pero sabemos que es un buen resultado y hay que hacerlo bueno en Múnich», señaló Filipe Luis.

Los precedentes tampoco son buenos para el Bayern: en las últimas ocho semifinales de Copa de Europa que empezaron con un 1-0 en la ida, sólo hubo una remontada en la vuelta. Además, en la historia sólo un equipo alemán le remontó un 1-0 a un rival español en competición europea sin necesidad de prórroga (el Kaiserslautern al Sevilla en 1982).

Mal precedente bávaro

Otra estadística positiva para la fe rojiblanca es que en las cuatro últimas temporadas, todos los equipos que disputaron el segundo partido de semifinales lejos de su estadio disputaron la gran final. «Yo doy por bueno el resultado. No queríamos encajar gol y lo hemos conseguido. En Alemania va a ser difícil, pero podemos conseguirlo», explicó Giménez. En 2014 el Bayern fracasó en su intento de remontar un 1-0 al Real Madrid en la ida de semifinales de la Champions.

Allí jugaba Xabi Alonso, que mandó mensajes claros a una afición atlética que le silbó y pidió a sus compañeros «aprender, no lamentarse», para que «no suceda lo mismo en el Allianz». «Podemos hacerlo. Creemos en nosotros», dijo. El guipuzcoano se mostró optimista de cara a las opciones del Bayern para la vuelta: «Me voy con sensación de que no nos llevamos el resultado que queríamos. Pudo ser mejor y peor. La mayoría de los atléticos pensarán que están en Milán, pero quedan 90 minutos. En casa podemos hacerlo, pero somos conscientes de que vamos a necesitar un gran partido en Múnich».

Su compañero Javi Martínez recuerda que el próximo martes deben «tener cabeza, porque 90 minutos son muy largos y si marcan un gol se complicará aún más». El capitán del Bayern de Múnich, Philipp Lahm, afirmó: «Ahora, con 90 minutos por delante, sabemos que podemos jugar muy bien en nuestro estadio», mientras que otro peso pesado del vestuario alemán como Manuel Neuer reiteró la creencia: «Podemos llegar a la final. Lo daremos todo en el Allianz».

Buen recuerdo para Torres

En aquel mismo escenario, Fernando Torres ganó su única Champions en las filas del Chelsea, cuando el favorito era el conjunto teutón, y por ello es doblemente optimista. «Tocará sufrir y seguir sufriendo, peleando, luchando, ante un gran equipo como el Bayern, que está a un nivel que pocos tienen, con nuestro orgullo y con ganas de seguir», dijo el fuenlabreño, que desea en Múnich repetir su racha: siempre marca en la vuelta de las semifinales europeas (2013-14, 12-13, 11-12 y 07-08).

El partido fue para muchos un duelo táctico, casi una partida de ajedrez. En la primera parte Simeone logró que Guardiola, cuya apuesta por Coman en lugar de Müller no le funcionó y terminó quejándose del estado seco y lento del césped, acabara en zugzwang (momento en el que uno de los dos está obligado a mover, aunque le gustaría no hacerlo, ya que sabe que empeora su posición), pero en Alemania comienza una nueva partida y todo está por decidir. «En Múnich no hay que meterse atrás. Hay que ir a por el partido. Tendremos que hacer las cosas muy bien para poder estar en la final», avisó Koke. El Atlético ha psado en seis de las nueve veces que se presentó en la vuelta con un 1-0.

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