Edición

Borrar
La panorámica del pabellón del Zaidín repleto de aficionados preside su ordenador.
«El club y la afición no son de LEB Plata. Llegará el momento en que el equipo tampoco lo sea»
BALONCESTO

«El club y la afición no son de LEB Plata. Llegará el momento en que el equipo tampoco lo sea»

Óscar Fernández-Arenas, presidente de la Fundación CB Granada

Juanjo Martín

Miércoles, 14 de junio 2017, 01:14

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Con ganas de más pero satisfecho. Así se muestra Óscar Fernández-Arenas, presidente de la Fundación CB Granada, después de quedarse a las puertas de un ascenso a Oro que siempre llegará en la pista y nunca en los despachos, idea que repite desde la creación del club y que no se ha alterado tras la decepción de esta última temporada.

¿Qué se siente al no salir los planes como se había planeado? Es la primera vez que sucede.

La noche de Zornotza fue especial. No sólo por caer eliminado, sino por los múltiples mensajes de apoyo de jugadores, patrocinadores y conocidos. Es un orgullo haber metido a seis mil personas en el Palacio dos veces en esta temporada, la última un martes por la noche. La vida del club es muy corta y hasta ahora no nos habíamos encontrado una piedrecita así. Lo importante es levantarse rápido y ya estamos trabajando en el próximo año.

¿Cómo se levanta uno de esta decepción?

Me gusta trabajar, trabajar y trabajar. Pensar que Iriarte hizo -7 de valoración en la final, después de meternos 25 puntos en ese quinto partido, no me daba consuelo alguno. Hay que invertir las energías en las cosas que podemos mejorar. Ese día ya hablé con tres agentes y me liberé por completo al concentrarme en el próximo curso.

Pablo Pin admite que hubo falta de humildad en algunos partidos. ¿Hubo exceso de confianza en el cruce ante Zornotza?

Jamás. En el cruce de cuartos preferíamos a Ávila porque sabíamos que Zornotza era un rival muy complicado a raíz de sus fichajes de la segunda vuelta. Nos eliminaron, pero tras una semifinal muy competida en la que tuvimos el tiro para ganar en el segundo partido, hubo una prórroga en el tercero y tuvimos diez puntos de renta en el quinto, desperdiciando tres posesiones para irnos hasta los dieciséis antes del descanso.

La temporada es más que la eliminación en 'play offs'. ¿Qué balance hace?

El balance es positivo porque al final una de las metas es afianzar el baloncesto en Granada. Viendo el nivel de afluencia, el número de empresas y el respaldo institucional debemos estar contentos porque el crecimiento está siendo bestial. Al día siguiente de Zornotza ya estaba a las siete de la mañana funcionando para la próxima temporada. Intentaremos seguir dando el máximo de alegrías posible.

¿Cuál ha sido la mejor virtud de esta temporada?

Hemos profesionalizado más el club. El año pasado era un grupo de amigos que venía de EBA. Estamos cogiendo un nivel de organización y de afición que no es de LEB Plata, sino superior. Llegará el momento en que el equipo tampoco lo sea.

¿Y el principal defecto?

Muchos partidos se nos han escapado por detalles. En la confección del equipo elegimos a gente contrastada en LEB Oro o Plata, pero nuestro puesto de alero ha sido más técnico y el de los rivales más físico. Eso nos ha hecho daño.

La afición sigue siendo el mejor activo. Seis mil personas en el Palacio no es baladí.

Siempre he valorado el trabajo de Pablo (Pin). No sólo por lo que hace en el club, sino por su manera de jugar. Cogió al equipo con doscientas personas en el Veleta y ahora hay seis mil en el Palacio, y eso se debe a su atractiva forma de jugar para la gente. Seguiremos en esa línea de buscar espectáculo.

Luchar por el ascenso parece una obligación para el próximo año.

Desde el primer año en LEB Plata nos están pidiendo que subamos a Oro. Recuerdo que, en la pasada campaña, un entrenador rival dijo antes de empezar que Jordan Stone iba a ser el MVP de la Liga. Nosotros habíamos visto seis partidos suyos, no sé cuántos habría visto él para decir eso... La ciudad y la afición nos piden el ascenso y nos dejaremos la piel para ganar todos los partidos, pero esto es deporte y no siempre se puede vencer.

¿Es consciente de que la 'fiebre' por el baloncesto puede desaparecer si no se sube pronto?

Sí. Lo más bonito es que sientan los colores del club, pero la gente nos dice que quiere venir al Palacio a ver ganar a su equipo. Si lleváramos mucho tiempo en Plata entendería que bajara la fiebre, pero trabajaremos para que se produzca el mejor resultado posible.

Si la FEB le ofrece mañana una plaza en LEB Oro, ¿qué le diría?

La rechazaría. Ya lo dije en Nacional y en EBA. Los ascensos son deportivos. No subiremos de otra manera porque la afición se merece conseguirlo en la pista. De hecho se nos ha ofrecido en el pasado, pero siempre hemos dicho que no.

Pin tiene un año más de contrato. Si no fuese así, ¿habría debate sobre su continuidad?

Ninguno, ese debate no existe ahora mismo en el club. En ningún momento se me ha pasado por la cabeza que haya otra persona que no sea Pablo al frente del equipo. Él podrá equivocarse, como cualquiera de los que trabajamos en el club. Para todos es una experiencia nueva, pues llevamos cinco años y los tres primeros fueron a nivel amateur. Los resultados son exquisitos para dos temporadas de deporte profesional como tal. Todo lo que se le pueda poner de malo hay que hacerlo de bueno con sus ascensos. El de Albacete, por ejemplo, no se le ha reconocido como debe porque muy pocos pensaban que íbamos a subir. Si yo echo horas en el club, Pablo igual o más. No hay día que no nos den las tres de la madrugada mandándonos mensajes sobre el equipo.

¿Hasta qué punto se tiene paciencia con Iván Martínez? Lleva dos años aquí y siempre castigado por las lesiones.

Lo que es incuestionable es su calidad. Ha tenido muy mala suerte y trabaja mucho en sus recuperaciones. Es muy válido para nosotros, pero hay que pensar en cómo se va confeccionando el equipo. Confianza en él hay y compromiso para que se quede también. Si se me pregunta ahora si seguirá diría que sí, pero hay que esperar a ver cómo construimos el equipo.

Entre descartes y retirados, se prevé revolución en la plantilla.

Las únicas bajas seguras son las de García y Fernández, que para sustituirles vamos a necesitar un milagro porque es imposible encontrar jugadores que se les parezcan, tanto en liderazgo como en calidad. Los demás pueden seguir. Si alguno no continúa se lo diremos personalmente, como hicimos el año pasado con Duane James y Jorge Fernández. Ha habido mensajes de Milekovic y Almeida que parecían despedidas, pero son por si acaso no siguen. Milekovic me dijo de quedarse aquí gratis.

Pablo Pin prefiere ahora una plantilla de nueve jugadores en vez de once. ¿Será esa la fórmula para conseguir el éxito?

Los últimos que han subido a Oro tienen plantillas cortas, de siete jugadores. Quizá no tengamos que irnos a una rotación larga, pues hay jóvenes que vienen desde abajo que nos pueden ayudar.

Para un club que nació con la intención de dar cobijo a la base, hacerles hueco en el primer equipo resulta casi obligatorio.

El año pasado recuperamos a Corts, que se crió aquí y los últimos años ha estado con Unicaja. Germán Martínez ha jugado catorce partidos, Marcos Vigo ha debutado, Edu y Alberto Pérez... Es fundamental que haya ese tipo de jugadores. Además, estamos hablando de chavales que han jugado un Campeonato de España contra Real Madrid y Barcelona. Hay que darles cabida.

¿Cómo han salido las cuentas?

Hemos cerrado con un superávit que invertiremos en el presupuesto del próximo año. Pagamos a los jugadores y a los trabajadores el día uno de cada mes y todos están dados de alta. Hay que ser serios y fiables para no cometer los mismos errores del pasado.

¿Cómo va el apoyo empresarial? ¿Mantendrá el equipo el nombre de Covirán?

Su presidente Luis Osuna me ratificó su apoyo máximo a este proyecto. Tenemos una relación más familiar que profesional, igual que con el resto de patrocinadores hasta los 72 que tenemos actualmente. Uno de los detalles más bonitos de la eliminación ante Zornotza fue que las redes sociales de compañías de ámbito nacional nos mostraron su apoyo público. Siempre se ha dicho que las empresas de Granada no apoyan al deporte, pero a mí me están demostrando justo lo contrario.

A nivel de instituciones parece que todas van a la par del club. La Fundación es la entidad de consenso, capaz de poner de acuerdo a 'Spiriman' y a Paco Cuenca.

(Risas) Eso fue una anécdota del vídeo de apoyo antes del cuarto partido. Nuestra relación con todos los partidos políticos es magnífica. Nunca hemos querido politizar el baloncesto, sólo mantener un buen trato con las personas que trabajan en el Ayuntamiento, Diputación y Junta. Sabemos que la situación actual es problemática y sólo les solicitamos lo que pueden darnos. Como ven que vamos en esa línea, el trato es muy fluido en ese sentido.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios