«Este sábado contra Sammic es un buen momento para romper la 'maldición vasca'»

El revés en Zornotza (75-72) supuso un frenazo a las aspiraciones coperas del Covirán, aunque aún no hay nada decidido. Eso bien lo sabe Alejandro Bortolussi, ala-pívot que promedia este curso 9'9 puntos y 5'4 rebotes y que ya ha dejado su impronta en forma de intensidad. Los nazaríes aprietan más los dientes en defensa con el argentino en pista, algo que será necesario para salir triunfador en los tres partidos que restan de la primera vuelta, empezando este sábado (18 horas) en la pista de Sammic.

El Covirán encajó la quinta derrota en Zornotza. El equipo nunca llegó a estar cómodo, pero hubo opción de triunfo hasta el final.

Empezamos muy mal. Eso le dio una ventaja a Zornotza para que estuvieran más cómodos que nosotros. Ir a remolque siempre cuesta más, sobre todo en una cancha difícil como aquella. También nos lastraron mucho las pérdidas. Ganamos el rebote y tuvimos buen acierto en los tiros, pero no pudo ser.

En los finales igualados siempre falta algo. Sólo se ha ganado así en Albacete con la canasta sobre la bocina de Milekovic.

A lo mejor nos falta minimizar errores. En los últimos minutos se cometen fallos que pueden corregirse, aunque es complicado porque te juegas mucho. Esos partidos son buenos de cara al futuro, para así tener experiencia en finales apretados con tal de que el próximo que tengamos se decante a favor nuestra.

¿Cómo de importante es para el club meterse en la Copa LEB?

No es vital pero todo el mundo quiere jugar la Copa. Tampoco se trata de un objetivo marcado como tal, pero siempre aspiras a lo máximo. Estar tan arriba a falta de tan poco para el final nos motiva.

¿Se habla de ella en el vestuario?

De momento no queremos pensar en eso. Ahora tenemos un partido contra Sammic, rival directo. A partir de ese partido sí pensaríamos un poco más, pero si no lo ganamos las opciones de Copa serían pocas.

El club siempre ha reconocido el deseo de luchar por ascender. ¿Es la Copa un 'ya que estamos...'?

(Risas) Para estar arriba y ascender hay que ganar todos los partidos y eso te lleva a la Copa. Nadie tenía ese objetivo al principio, pero con el paso de las jornadas te ves cerca y te entra el 'gusanillo' por jugarla.

Este sábado es definitivo. 'Pinchar' contra Sammic sería prácticamente decir adiós a la Copa.

Sí, si no ganamos ese partido no tendríamos opciones. Hay que ir poco a poco y darle importancia a lo que supone la Liga. Hemos ganado a casi todos los equipos que están en lo alto y este sería un triunfo más que nos permitiría un buen 'colchón' de cara a la segunda vuelta.

El hecho de jugar tres encuentros seguidos lejos del Palacio no les ha venido bien para este 'sprint'.

Las circunstancias han venido así. Es complicado jugar tres partidos fuera, dos de ellos con desplazamientos largos al País Vasco, pero no es excusa. También hay que ver que al final de la segunda vuelta tendremos la ventaja de tres partidos seguidos en casa.

Aunque ha llegado este verano, ¿le ha llegado la 'maldición vasca' que pesa sobre el equipo? Cuatro partidos allí y todos perdidos.

Algo me han comentado, pero las maldiciones están para romperlas y este sábado es un buen momento para ello. El equipo está muy motivado para ir allí y ganar. La derrota con Zornotza fue dura pero no se ha notado anímicamente. La gente ya ha cambiado el chip y eso es positivo porque hemos aprendido a extraer la lección de cada derrota y pensar ya en el siguiente choque.

El Covirán ha mostrado dos versiones. Una en la que rezuma seriedad ante rivales de entidad y otra en la que se deja sorprender por adversarios más asequibles.

No creo que haya habido relajación por nuestra parte, porque al final no importa el contrincante y los partidos se preparan igual. Quizá se ha debido al estilo del rival, que se cierra más. Aun así, encontraremos la clave para ser un equipo competitivo contra todos los oponentes.

¿Qué derrota es la que menos entraba en sus cuentas?

Ninguna sienta bien, pero quizá la de León o Alcázar. Son equipos que saltan a la pista a tope y sin nada que perder. Por ahora siempre hemos estado por encima en la tabla y somos el equipo a batir. Por eso la gente sale muy intensa ante nosotros y eso nos ha jugado malas pasadas.

En lo que va de temporada ha mostrado su carácter y garra en la cancha, aportando en diversas facetas. ¿Cómo se ve en lo personal?

Bien, siempre he sido un jugador de equipo y la intensidad me caracteriza. Poco a poco iré aportando más en ataque, en el rebote... Me noto bien. No me gusta decir que estoy al máximo porque soy muy exigente conmigo mismo. Creo que puedo dar más y trabajo para lograrlo.

El apodo de 'Felipe Reyes' argentino le encaja bien.

Es un halago que me comparen con él. Sólo espero demostrar que soy Alejandro Bortolussi, quien lo deja todo en la pista cada día. Ojalá la gente se quede con eso.

Fichó por Granada para estar más cerca de Málaga. ¿Qué conclusiones saca por ahora?

Conocía la ciudad y sabía que se vive muy bien aquí. Me encontré un club muy profesional para lo que se ve hoy día en Plata. La directiva es muy cercana y eso siempre conduce a un mejor rendimiento.

Podría haber seguido en Oro, tenía cartel para hacerlo. ¿Tanto poder de convicción tiene 'Carlinhos'?

Que estuviera aquí me ha venido de maravilla, es genial. Tenía varias ofertas y me incliné por tener más minutos, así como por un proyecto más interesante y un club serio, antes que seguir en Oro con menos minutos. Fue una decisión difícil, pero muy acertada.

Segundo máximo anotador, sólo por detrás de Lattibeaudiere. ¿Se nota un jugador importante?

Todos lo somos. Tenemos un equipo en el que cualquier jugador puede romper un partido. A la larga eso nos llevará arriba. Pablo (Pin) confía mucho en mí y eso me motiva para superarme.

• Temas
• Covirán
• Fundación CB Granada
• baloncesto