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La fidelidad de la afición granadina quedó patente en el Palacio de los Deportes.
La afición más fiel de la LEB Plata
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La afición más fiel de la LEB Plata

La Fundación logra en su estreno en el Palacio de los Deportes una media de tres mil espectadores, con un máximo de 4.286 personas que acaparó titulares a nivel nacional

Juanjo Martín

Miércoles, 8 de junio 2016, 01:25

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La Fundación CB Granada se ha estrenado este año en el Palacio de los Deportes, una cancha que ha revivido gracias al conjunto nazarí para tener algo más que espectáculos puntuales de diversa índole, desde deporte a conciertos. Esa mudanza generó cierta incertidumbre en la entidad capitalina, pues estaba el temor de que el graderío del pabellón del Zaidín resultase demasiado amplio para la demanda de público del equipo.

Si bien el pabellón Veleta siempre lució un perpetuo lleno en Liga EBA, el medio millar de personas que puede llegar a acoger la coqueta instalación no tiene ni punto de comparación con los más de siete mil que puede albergar el Palacio. Aun así, conforme arrancó la campaña en LEB Plata se demostró que los seguidores nazaríes son los más fieles de toda la tercera división del baloncesto nacional.

La Fundación planeaba tener bajados los toldos que cubren las diferentes partes del graderío e ir levantándolos con el paso de las jornadas. Sin embargo, ese planteamiento pronto tuvo que redefinirse al encontrarse con una afición que agotó las entradas puestas a la venta en los dos primeros partidos. La campaña de abonos auguraba una buenas cifras de asistencia, pero no tan óptimas como para rebasar incluso las previsiones más optimistas por parte del club.

En el debut contra el Xuven Cambados de Migue Hoyo, los tornos de acceso al Palacio marcaron 2.279 espectadores, una cifra que se aumentó de manera paulatina en el resto de compromisos que afrontó el Covirán como local. La primera ocasión en la que se superaron los 2.500 aficionados sucedió en el duelo contra Ávila, que casualmente se convirtió en la primera derrota en casa de los nazaríes, que llegaron a ostentar el liderato de la LEB Plata en las jornadas iniciales a raíz de su condición de invicto en los choques bajo la etiqueta de anfitriones.

Después de que en el mes de diciembre no hubiese ni un partido como local, el encuentro del 2 de enero apuntaba a ser un fiasco en la convocatoria con la afición, pero esta respondió pese a las Navidades con algo más de dos mil quinientos seguidores. El Covirán siguió al alza, de ahí que no extrañara que se rompiera la barrera de los tres mil espectadores en el partido ante Zornotza. La dinámica ascendente continuó quince días después, cuando se estableció el récord de la campaña en toda la LEB Plata.

Salto a la fama

Ante Sammic, 4.286 personas se congregaron en el Palacio en una cita en la que no se conquistó el triunfo, pero sí el respeto a nivel nacional por obtener una asistencia superior a la de encuentros de Oro o incluso de ACB. La noticia se expandió por toda la geografía española, que se hizo eco de que la Fundación había recogido a la perfección el testigo dejado por el desaparecido 'Cebé'.

Los duelos contra los ascendidos Marín (3.998) y Araberri (3.585) redondean el podio de mayores asistencias del Covirán, que tan sólo sufrió un lógico tropiezo en el partido del Sábado Santo ante un rival con poco atractivo como Olivar (2.017 personas). Una vez en 'play offs' se esperaba haber logrado un nuevo récord, pero el hecho de jugar entre semana -jueves- dañó significativamente en el graderío. Ante Ávila se llegó hasta los 3.585 espectadores, lo que sirvió para cerrar una media de 2.996'5, es decir, al borde de las tres mil personas.

Estos guarismos generan un enorme sentimiento de orgullo en la Fundación, cuyo presidente Óscar Fernández-Arenas explica que «el sentimiento del baloncesto aún estaba impregnado en Granada y lo mejor ha sido ver un ambiente muy familiar, con muchos niños que se han podido enganchar a este deporte. Ha sido una maravilla y mi ilusión para la temporada que viene pasa por dar un poco más en la pista para que venga más gente a vernos». El terreno está bien abonado para hacer realidad ese deseo.

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