Cápsula: entusiasmo y convencimiento del rocanrol en el escenario

Auspiciados por la inquieto 'club de música' Borabora, el trío de 'Buenos Bilbaos' regresó por aquí, lo que es, no una buena noticia sino una muy grande, porque es difícil encontrar en la actualidad tanta actitud, entusiasmo y convencimiento encima de un escenario. Con ellos templado el patio estuvieron también Telephants.

Dijeron de Cápsula que serían el grupo que le gustaría tener a Mario Vaquerizo si supiese tocar algo y cantar afinado. Y sí, el trío de Martin Guevara y Coni Duchess (con anunciado batería nuevo por cierto: Iñaki Guantxe, de Señor No etc) resume todo le imaginario Rock & glam del representante de Alaska. Con perfil de navaja a lo Lux Interior, Guevara condensa en sus dedos dos décadas de rock, y del citadino: puede inquietar como la Velvet, sacar el glamour impostado de los NYDolls, la ponzoña Stooge o la fantasía melódica y galáctica de su (san) Bowie; tiene algún manotazo stoner y la garra del blues con rimmel que caracterizó la primera parte de los años setenta. Puede tener esos 'referidos', y muchos más, y metabolizados tan a la perfección que suenan euforizantes y, sobre todo, auténticos y creíbles, algo que trajeron ya tatuado en el alma desde su Argentina natal, donde no hay aficionados al rock: ¡son hinchas!

Se les busca 'Vivos o muertos' como anuncian en su último disco, y se ofrecen vivísimos y contagiantes. Saben lo que quieren, saben cómo conseguirlo, también tocarlo con habilidad, soltura y fluidez. ¿Qué más se puede pedir a un trío de rock and roll? Sí que el casi lleno de la sala lo sea completo la próxima vez, porque valen lo que cuestan.