Motril toma medidas para recortar los 127 días que tardan en cobrar sus proveedores

El Ayuntamiento de Motril ha comenzado este nuevo ejercicio con sus presupuestos de 2015 prorrogados y así funcionará, al menos, durante el primer trimestre del año. Los planes del equipo de gobierno que lidera la socialista Flor Almón pasan por diseñar unas nuevas cuentas para 2016 que tendrá que negociar con la oposición, ya que los 12 votos del equipo de gobierno no garantizan la mayoría absoluta (13 votos) por lo que necesitará buscar apoyos -o al menos abstención- de alguno de los grupos de la oposición, PP e IU.

«Serán unos presupuestos participados primero porque no tenemos más remedio y segundo porque es nuestra filosofía negociar y dialogar», explica el teniente de alcalde de Economía del Ayuntamiento de Motril, Francisco Sánchez Cantalejo que se da un plazo, como mínimo de tres meses, para tratar de llegar a acuerdos. El equipo de gobierno motrileño (PSOE y PA) ya tuvo que aplicarse a fondo en la negociación para sacar adelante las ordenanzas fiscales, que finalmente se aprobaron con la abstención del PP y el voto en contra de IU. Estas ordenanzas determinan los ingresos para el presente ejercicio 2016 y condicionarán el presupuesto municipal por la rebaja de impuestos que contempla, que se traducirá en la consiguiente merma de la partida de ingresos fijos. Concretamente la bajada del 5% del IBI, el 5% de la plusvalía o de un 25% en las tasas que pagan las terrazas de los bares, entre otras, supondrá un millón y medio menos de ingresos fijos para el Ayuntamiento con respecto al presente ejercicio. Sin embargo, al equipo de gobierno socialista le salen las cuentas. Cantalejo entiende que el descenso de impuestos municipales contribuirá a reactivar la economía y que esto se traducirá en un efecto 'retorno' para las arcas municipales.

Reactivar la economía

En total, la partida de ingresos por impuestos y tasas municipales está fijada en 24,8 millones de euros, que el equipo de gobierno confía en ver aumentada con si se consigue una mayor actividad económica en el municipio.

Y para reactivar la economía local, el gobierno municipal se ha fijado otro objetivo prioritario: pagar lo que debe y devolver su dinero a las pequeñas empresas locales. Cantalejo explica que el Ayuntamiento ha puesto en marcha un plan de tesorería para planificar los ingresos que recibirá e ir acortando los plazos de pago a los proveedores «para dar certidumbre a las empresas».

«El dinero no tiene que estar en el Ayuntamiento sino en la calle. Los proveedores estaban haciendo de banco, financiando al Ayuntamiento y eso no puede ser. Nuestra apuesta es rebajar la deuda municipal y que ese dinero esté en la calle», afirma rotundo el concejal de Economía.

Sin incrementar la deuda

Este periodo de pago medio a proveedores oscila en función del trimestre del año ya que los ingresos del Ayuntamiento son variables en los distintos periodos. Los últimos datos disponibles del Ministerio de Hacienda son de octubre de 2015, y fijaba en 127,95 días el plazo medio de pago a proveedores del Ayuntamiento de Motril, uno de los más altos de toda la provincia. Y esto es algo que este equipo de gobierno quiere cambiar de forma radical. Para ello, el Ayuntamiento ha pedido ya una póliza de cuatro millones de euros que le permitirá adelantar el pago a proveedores. «Es una póliza que nos da liquidez para saldar deuda con proveedores, un adelanto que el banco hace con cargo a los impuestos municipales y que se cancelará en el año, no incrementa la deuda financiera», explica el edil.

El gobierno municipal pretende dar así en 2016 un «balón de oxígeno» a las empresas que le prestan servicios. En este sentido el socialista cree que el anterior gobierno municipal del PP «no aprovechó» el plan de pago de proveedores del Gobierno central. «Si se hubiera reconocido toda la deuda ahora estaríamos más saneados. En Salobreña un ayuntamiento tres veces más pequeño se pidió prácticamente la misma cantidad que en Motril. Si se hubiera reconocido la deuda no se hubiera judicializado, lo que al final supone pagarla con recargo», indica Sánchez Cantalejo.

El ejemplo que pone es la situación de Limdeco casi cuatro de los 11 millones que debe a la Seguridad Social son en concepto de recargo y penalizaciones por no pagar en tiempo y forma.

La deuda comercial del Ayuntamiento de Motril -lo que debe a proveedores- es de 10 millones de euros. El gobierno de PSOE y PA pretende ir saldándola de manera que en este ejercicio 2016 no quede ni una factura de fecha anterior a 2015, «y llegar al menos a abonar toda la mitad de 2015». «El objetivo es reducir esta deuda a los gastos del año, y pagar a 30 días», advierte el edil. Y es que, sin duda, recibir a los proveedores que llegan a su despacho reclamando el pago por sus servicios es «lo más duro» del día a día del concejal de Economía, junto a los ciudadanos que no pueden hacer frente a los impuestos municipales. Este es otro de los caballos de batalla nuevo gobierno municipal que quiere dejar su impronta social en los próximos presupuestos que diseñe con más apoyo a las familias que lo necesitan. «La ley impide dar subvenciones directas para pagar impuestos pero sí podemos buscar vías para que los jubilados o parados de larga duración tengan alguna ayuda. Nuestro objetivo es favorecer a estos colectivos», concluye.